El Kessel de Halbe o la destrucción del 9º Ejército

Paradise Lost

07-07-2006

Hola a todos.

Os paso a relatar y documentar con fotos no muy conocidas, lo que sucedió a finales de abril en el bosque de Halbe, después de la caída del frente del Oder y lo que allí aconteció con el 12º y 9º Ejércitos como protagonistas. Ésta es la primera parte.

El 20 de abril el ataque sobre el Frente del Oder fue decisivo y produjo la caída de éste.

Al Norte del Frente se encontraba Rokossowski, en el centro Zhukov, y al sur Koniev.

Tras cruzar el Oder, Zhukov se dirige al sur y Koniev al norte, consiguiendo atrapar al 9º Ejército con un movimiento de tenazas en los bosques de SpreeWald.

Se calcula que 200.000 hombres fueron cercados. Entre ellos se encontraban muchos civiles, que huían del ataque soviético del Este y a los que la guerra había alcanzado.

Al mado del 9º Ejército estaba el General Theodor Busse, por orden expresa de Adolf Hitler. Busse disponía sólo de 31 tanques: 6 Panther del Kurmark, restos de la 21 división Panzer y 10 Tiger II del 502 batallón. Efectivos muy escasos contra todo e lpotencial soviético.

El 25 de abril, los ejércitos de Koniev y Gordov cerraron el paso ante una posible fuga del 9º Ejército de Busse, pero quedó una zona débilmente defendida por la que los alemanes intentaron cruzar la autopista de Berlín-Dresde.

Una avión de reconocimiento de la Luftwaffe localizó desde el aire un grupo del Ejército de Busse intentando escapar hacia el Oeste, a pesar de que Hitler había hecho un llamamiento a que el 12º Ejército de Wenck y el 9º de Busse debían liberar Berlín del ataque soviético. Al saber que Busse no contestaba sus mensajes, y no se dirigía a Berlín, Hitler se enfureció y envió el siguiente mensaje:

“El Führer desde Berlín, espera que los ejércitos cumplan con su deber. La historia y el pueblo alemán despreciarán a todo hombre que, en estas circunstancias, no lo de todo por salvar la situación y al Führer.”

A todo esto, el general Wenck se encontraba con el 12º Ejército en el Elba. Tras recibir la orden de Hitler de liberar Berlín, Wenck se dirige al Oeste, pero con otra intención: abrir un corredor para que el máximo número de personas huya a través de éste y se dirijan al Oeste.

El 26 de abril comenzó el último ataque alemán de la Segunda Guerra Mundial. Al principio los rusos fueron tomados por sorpresa y Wenck avanzó rápidamente hacia el Este, pero fue detenido en las inmediaciones de Postdam.

En ese momento Busse se puso en contacto con Wenck y le pidió ayuda para intentar sacar a sus soldados del Kessel de Halbe y huir también hacia el Oeste. Wenck mantuvo sus posiciones para esperar la llegada del 9º Ejército o lo que quedase de él.

El 12º Ejército avanzando hacia el Este.

Respecto a la desobediencia de Wenck a las órdenes de Hitler, éste primero comentó después de la guerra:

“En aquellas horas vi con toda claridad, que Hitler y Keitel no sabían lo que sucedía en realidad. Era imposible liberar Berlín de aquel cerco. Pero mucha gente podía ser salvada, si mediante un ataque se abría un corredor hacía el Oeste. Parecía que era posible sacar el 9º Ejército del Kessel.”

Volviendo al Kessel de Halbe, la batalla se recrudecía por momentos. Los tanques sovéticos disparaban contra las copas de los árboles. De esta manera las astillas que saltaban se clavaban en la carne de los soldados y las pesadas ramas caían sobre ellos. A todo esto había que añadir que no se podían cavar trincheras en aquel suelo arenoso lleno de raíces. Los soldados que caían eran aplastados por las orugas de sus propios vehículos.

Hans Hansen

*“Los primeros día fueron muy duros. Los rusos presionaban en el Kessel. Atacaban con artillería y unidades aéreas sin cesar. Solo habábamos de una cosa cuando teníamos un momento de tranquilidad: ‘¿Cómo saldremos de aquí?’.”

“Avanzábamos hacia delante. El bosque estaba tranquilo. Delante nuestro emergió una pueblo que ardía en su mayor parte. Cuando nos aproximamos vimos el nombre del pueblo en la estación: Halbe. Nunca había oído ese nombre. Supongo que los demás tampoco.”

“Un grupo de panzers se dirigió hacia nosotros para darnos protección. Los Panzers avanzaban con sus cadenas sobre los cuerpos de los soldados muertos y heridos. Fueron imágenes espantosas que no se pueden olvidar 60 años después... pero al menos tuvimos la ayuda de los Panzers que nos ayudaron a romper las líneas soviéticas.”*

Diario de un soldado del Kessel de Halbe:

“Es una lucha sin esperanza y debemos soportarlo todo. Cae un impacto entre la multitud y se oye gritar a muchos camaradas. Se quedan tumbados y los tanques enemigos pasan por encima de ellos.”

El 27 de abril, el 9º Ejército intentó salir desde Halbe a Baruth, y al norte desde Teupitz. Pero el ataque fracasó.

El 28 de abril se efectuó otro ataque desde Halbe por el bosque de Spreewald contra la 50 División soviética de Guardias Fusileros. Aunque las bajas fueron enormes, algunas unidades consiguieron escapar.

El día 29 los rusos lanzan un gran ataque con artillería y cohetes Katyusha, causando numerosas bajas al bando alemán.

El 9º Ejército abriéndose paso hacia el 12º Ejército de Wenck.

La tensión entre las fuerzas heterógeneas del Ejército aumentaba, sobre todo entre las SS y la Wehrmacht. Muchos soldados de la Wehrmacht desertaban y las SS se encargaban de perseguirlos. La Wehrmacht recriminaba a las SS que no recogieran a sus heridos, y circulasen en sus vehículos ajenos a todo esto.

La visión de la aldea de Halbe era un auténtico infierno: las calles estaban atestadas de cadáveres o heridos que nadie podía atender. Si los heridos caían de un abarrotado camión o tanque nadie se preocupaba en recogerlos y eran aplastados por el siguiente vehículo. Los muertos o heridos graves eran abandonados a su suerte en las cunetas.

Diario de un soldado del Kessel de Halbe:

“Se había dicho que las últimas horas de esta guerra iban a ser horribles. Y así es. ¿Por qué no se acaba de una vez? ¿Por qué nadie da la orden de acabar con esta maldita guerra? ¿Por qué debe ser todo destruido?"

El soldado que anotó estas palabras no sobrevivió.

Anatolij Bogatschkin

"Nuestra artillería disparó contra el primer vehículo por dónde los alemanes circulaban, para que no pudieran avanzar, ya que el bosque lo rodeaba todo. Lo dejaron todo allí y sólo cogieron sus armas. Nosotros gritamos: ‘¡Manos arriba’! y levantaron las manos y se dirigieron hacia nosotros. Esperamos. Cuando apenas estaban a unos metros empezaron de nuevo a disparar. Acabamos rápidamente con aquel teatro y con muchos soldados y oficiales alemanes. Volvieron a rendirse otra vez y lanzaron sus armas y levantaron los brazos. En el bosque había un prado, formaron en filas y se les hizo marchar en dirección a Siberia. Un suboficial alemán mandaba el grupo. Era un hombre fuerte y pelirrojo. Y dijo: ‘A Rusia. A Siberia. En marcha.’"

Incluso llegaron a lanzarse octavillas sobre el bosque para animar a los soldados alemanes a rendirse. Woina kaputt. Domoi. Woina kaputt! podía leerse en las octavillas. (La guerra ha terminado. Volved a casa. La guerra ha terminado).

Finalmente el 1 de mayo de 1945, 25.000 soldados llegaron hasta Wenck cerca de Beelitz. Koniev mintió, y dijó que sólo 3.000 lo habían conseguido. De los demás, 120.000 sobrevivieron y fueron hechos prisioneros. La mayoría desapareció en los campos de trabajo soviéticos.

Hans Dietrich Genscher

“No olvidaré nunca esas imágenes, con montones de heridos que eran transportados en vehículos, otros en camillas. Entre ellos había muchas enfermeras. Era la imagen de un Ejército que dejaba detrás suyo el horror. Es una imagen que se me ha quedado grabada y que me demuestra que una guerra no tiene sentido."

Wenck a la derecha, y Guderian a la izquierda.

El general Wenck fue hecho prisionero por los americanos en mayo de 1945 tras rendirse. Tras la guerra, trabajó en la empresa privada hasta que, con la fundación de la República Federal de Alemania (1949), fue requerido por Adenauer (entre otros militares de la antigua Werhmacht, como el General Hausinger) y se reincoporó al Ejercito federal alemán a mediados de los años 50, llegando a ser su Comandante en Jefe. Se retiró en 1966. Walther Wenck falleció el 1 de mayo de 1982 como consecuencia de un accidente de tráfico.

Busse en primer plano, a la derecha de la imagen.

El general Busse fue prisionero de guerra entre los años 1945 y 1946. Durante los Juicios de Nuremberg se le preguntó a Busse por que había tomado el mando del Noveno Ejército si consideraba que la guerra estaba perdida. Busse afirmó que había deseado dar tiempo a los civiles alemanes de escapar de la furia bolchevique de este. Aseguró también que hubiera preferido morir que rendirse a los rusos. Después de la guerra, Busse trabajó en Alemania Occidental como director de Defensa Civil, y escribió varios libros de historía militar de la Segunda Guerra Mundial. Murió en Wallerstein, el 21 de octubre de 1986.

El bosque de Halbe en la actualidad.

Fuentes: *Der Jahrhundertkrieg: Der Sturm. Die Todesfalle. ZDF.

Berlín, la caída: 1945, Antony Beevor

http://es.wikipedia.org/wiki/Theodor_Busse

http://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Halbe

http://es.wikipedia.org/wiki/Walther_Wenck*

Saludos

Deleted member

08-07-2006

¡Hola, Paradiese! Me da mucho gusto ver de nuevo tus post, como se costumbre, impactantes y muy completos. ¡Impresionante el aniquilamiento del ejército de Wenck! ¡Y pensar que Hitler contaba con esos refuerzos para levantar el cerco de Berlín! Absolutamente imposible.

Viendo todos esos testimonios fotográficos de la tragedia alemana, a veces me maravilla que Alemania exista aún como estado nacional.

Me trae a la memoria el melancólico cántico mexica tras la conquista española:

"Es ya bastante que se nos haya quitado,

que se nos haya impedido

nuestro gobierno...

Dejadnos morir,

dejadnos ya perecer,

puesto que nuestros dioses

han muerto".  (Códice. Sahagún. León Portilla)

Wittmann

08-07-2006

Necesitaría un emoticón de esos que les cae la baba, fantastico, bueno realmente en tu linea Paradise esto es un correo trabajado si señor, todo en el bueno. Tenía olvidada esa fantástica foto de guderian en traje de carrista.

Un aplauso, Dios mio, que envidia, ya podia yo hacer algo asi :D

Deleted member

09-07-2006

Leí esto en tu foro Paradise, ya me encanto, y te hubiera pedido que lo postearas aquí, pero como ya te pedí una vez... pues me parecía un poco mal... a pesar de todo debo felicitarte aquí amigo... tu trabajo es increible y muy interesante. Ojala postearas un "poquin" más por aquí.

Paradise Lost

09-07-2006

Muchas gracias.

Aunque tampoco es para tanto...

Sólo hay que buscar en poquito en Internet, leerse algunos libros, buscar documentales, hacer capturas de pantallas, saber alemán........  :P

Saludos desde Marinovka

Deleted member

10-07-2006

Muchas gracias. Aunque tampoco es para tanto... Sólo hay que buscar en poquito en Internet, leerse algunos libros, buscar documentales, hacer capturas de pantallas, saber alemán........ :P

Nada hombre, nada ;D ;D ;D ;D Si te parece poco... jajaja

Lenz Guderian

12-07-2006

Me sumo a lo dicho por los camaradas. Impresionante.

Y como ya saben en su Foro hay mucho mas por ver y leer.

Ernst Barkmann

28-07-2006

Actualmente me estoy leyendo el libro de Antony Beevor 'Berlín; La caída 1945'. En estos momentos estoy en este episodio  de la guerra. Aparte, he podido visionar algun momento de este documental y aunque está en alemán se entiende perfectamente con las imágenes.

Desconocía totalmente esto y la verdad es que es bastante trágico y agónico. Sobretodo para los civiles. La inmensa mayoria venian de Prúsia Oriental, donde los rusos pasaron a sangre y fuego.

La verdad es que no me estraña que la gente no lo olvide despues de 60 años.

Hiwi

13-08-2006

Fuuuu.......anonadado me dejas......la verdad que ya echaba de menos leer un post de paradise......como siempre perfecto  ;)

Paradise Lost

15-08-2006

Hola a todos.

Muchas gracias.

Como os ha gustado os dejo la segunda y última parte.

Hola a todos, aquí os paso la segunda parte de la capitulación del Ejército de Wenck.

Después de contactar con el 9º Ejército de Busse y avanzar hacia el Oeste, su objetivo no resultó nada fácil.

Lo que quedaba del Ejército de Wenck.

Hans-Dietrich Genscher estaba a las órdenes del general Wenck, en aquel entonces, y nos relata como el General hizo saber a sus hombres sus planes futuros.

Hans Dietrich Genscher

“El general Wenck llegó con una moto con sidecar, se bajó y se dirigió a nosotros: ‘Camaradas, os pido que resistáis en esta posición. En 3 días llegará el 9º Ejército desde Frankfurt en el Oder, con muchos heridos y enfermeras. No deben caer en manos del Ejército Rojo. Os prometo que después os guiaré junto con el 9º Ejército hacia el Oeste, hacia el cautiverio de los estadounidenses.’”

Después de conseguir la hazaña, como puede leerse en el anterior post, el Ejército de Wenck se dirigió al Oeste y alcanzó el Elba.

El 3 de mayo empezaron los primeros diálogos entre Wenck y el Ejército estadounidense bajo el mando del General Simpson, cuyo representante fue el General Moore, y por parte alemana, el General Reichsfreiherr von Edelsheim en el Ayuntamiento de Stendal.

General Reichsfreiherr von Edelsheim.

General Reichsfreiherr von Edelsheim dirigiéndose al Ayuntamiento de Stendal.

El general Moore le dio a entender a Edelsheim que los soviéticos eran los aliados de los estadounidenses, y que estos últimos ya tenían más prisioneros de los que necesitaban. Finalmente se llegó al acuerdo en el que los soldados que quisieran rendirse deberían cruzar el Elba. En este principio de acuerdo no estaban incluidos los civiles, que no podrían cruzar el Elba para entregarse. Sólo militares.

Negociaciones en el Ayuntamiento.

La zona por donde debían cruzar el río era el puente de Tangermünde. El principal puente sobre el Elba, pero que estaba destruído. 100.000 soldados alemanes esperaban ansiosamente desde la otra orilla para cruzarlo, mientras el Ejército soviético les pisaba los talones. Un humilde río era la separación entre los Gulags soviéticos y el cautiverio estadounidense.

Cualquier cosa que flotase era válida para cruzar el río. Incluso a nado.

Así Wenck dio la orden de que hasta el 7 de mayo, todos los heridos y soldados desarmados debían cruzar el río y después las tropas de combate. El 7 de mayo a las 9 y 10 comenzó el armisticio y a las cinco cruzaron las últimas tropas. En el último bote se encontraban Wenck, el coronel Reichhelm, 2 oficiales y algunos soldados. Su cautiverio comenzó al otro lado del Elba.

Soldados alemanes rindiéndose y entregando sus armas.

**Chester Twentyman, de Virginia,

102 División de Infantería**

*“Llegaban totalmente equipados. Con Panzerfausts y fusiles. Les ordenaba lanzar sus armas al río y entonces cruzarlo. Debían de hacerlo con mucho cuidado.”

“Los pilotos rusos nos sobrevolaron, y descubrieron que los alemanes intentaban cruzar el puente para rendirse. Atacaron con el armamento que llevaban a bordo. Algunos resultaron heridos. Otros murieron.”*

El puente era para los rusos un blanco fácil. Pero los que huían no cejaban en su empeño. La esperanza de que las tropas americanas se enfrentasen a las soviéticas desaparecía. Nadie se quería aliar con los alemanes.

Vista de los aviones sovíeticos desde el aire.

En el cartel puede leerse: "Esto hay que agradecérselo a nuestro Führer".

Detrás de ellos, los soviéticos atacaban con granadas y fuego de artillería. Al otro lado de la orilla les esperaban primeros auxilios, medicinas, enfermeras...

Los estadounidenses no se hicieron cargo de los civiles que también querían cruzar el puente, tal y como se había acordado con el general Wenck. Muchos fueron devueltos a la zona entre el Elba y el Oder, ahora ocupada por los soviéticos.

Los civiles que intentaban cruzar el río, normalmente eran devueltos a la otra orilla.

*Algunas mujeres, como intento desesperado para alcanzar la otra orilla, se vestían con uniforme militar,

o se colocaban el casco de acero en la cabeza.*

Hans Hansen

“El 6 de mayo fue para mi como si hubiera vuelto a nacer. Después de todo lo que me había pasado, podía comenzar mi vida de nuevo. Habíamos sobrevivido. El cautiverio no fue muy grave. Vivíamos y teníamos un futuro por delante.”

En 1997 la firma Max Bögl recibió el encargo de reconstruir el puente.

Aquí tenéis algunas imágenes sobre el momento de su colocación.

El cementerio de Halbe y el bosque hoy en día.

Las cifras hablan de 60.000 soldados que cayeron en el bosque de Halbe, aunque a es difícil saberlo con exactitud.

Se calcula que unos 26.000 aun no han recibido sepultura.

Hoy en día aun se pueden encontrar restos humanos, que esperan a recibir una digna sepultura.

Como Erwin Kowalke, que se encarga de localizar y reconocer los caídos en el bosque. Erwin ya ha rescatado los esqueletos de 8.000 soldados. Esos soldados pueden ser reconocidos por la placa metálica de identidad que llevaban colgada al cuello. Los familiares de esos desaparecidos ya pueden saber donde descansar los restos de sus seres queridos..

A pesar de su esfuerzo, sólo uno de cada diez tumbas en Halbe tienen nombre.

El cementerio de Halbe en la actualidad.

Fuentes: *Der Jahrhundertkrieg: Der Sturm. Die Todesfalle. ZDF.

http://www.zdf.de/ZDFde/inhalt/3/0,1872,2295395,00.html

http://www.sachsen-anhalt.de/LPSA/index.php?id=pgg3or9l5376

http://www.ritterkreuztraeger-1939-45.de/Infanterie/Wenck-Walther.htm*

Saludos

Moisin-Nagant

15-08-2006

La verdad que muy bueno Paradise, muchas gracias, y aunque este fuera de lugar yo tengo una campera como esta  :)

Wittmann

15-08-2006

Gracias por deleitarnos otra vez.

Quiero recordar a todos que Paradise administra un foro propio -que considero hermano por muchas razones al nuestro- [url]http://weltkrieg.forum.ijijiji.com/[/url]

Creo recordar que fue una retirada tactica -realmente unos cientos de metros- lo que evito la masacre absoluta del ejercito aleman

.

P.D. Hans Dietrich Genser fué durante muchos años ministro de asuntos exteriores, desconocía su articipación en esa batalla, gracias por la info,

Reinhard

16-08-2006

Muy interesante, y muy enriquecedor, Paradise.

Triste final para las gloriosas tropas alemanas, triste. :-\

Como dato, "simpatico" Busse se quejaba continuamente a sus subordinados más directos que Hitler además de estar medio ciego, ( tenian que ponerle unos textos con letras enormes para que fuera capáz de leer ), tenia una halitosis galopante y muy preocupante.

Rein.

Haz login o regístrate para participar