Wunderwaffen: la bomba atómica nazi

P47DThunderbolt

01-08-2006

[size=14pt]mi primer artículo ;D ;D ;D[/size]

En su wagneriana caída, el tercer Reich mantiene el ánimo combativo de millones de alemanes con una promesa: la existencia de WuWa, la WunderWaffen, un "arma maravillosa" definitiva que cambiará para siempre el rumbo desfavorable de la guerra. Simultáneamente desde 1942 se desarrolla en Estados Unidos un esfuerzo industrial y científico sin precedentes: el llamado "proyecto Manhattan", destinado a crear la bomba atómica.

A principios de 1945 el colapso del ejército nazi es inminente, sus comunicaciones y suministros han quedado destruidos y en mayo el fin llega tras el suicidio de Adolf Hitler. Un comando especial del servicio de inteligencia americano, al que se conoce como "ALSOS", se encarga de investigar y recopilar cualquier información referente al programa de la hipotética bomba atómica nazi.

    Finalmente el comando encuentra, escondido en una gruta excavada bajo una iglesia de Haigerloch, el reactor experimental B-VIII, un tosco recipiente de agua pesada, con un par de inservibles reactores sumergidos en su interior. Samuel Gouldsmit, jefe de la operación "ALSOS", es tajante en sus conclusiones: el proyecto de la bomba atómica de Hitler fue un mito creado para someter la voluntad de millones de alemanes a una resistencia sin esperanza en una guerra suicida . La prometida WuWa no existió jamás. En las vísperas de la batalla de Kursk, un teletipo por valija diplomática fue enviado a todas las embajadas alemanas en Europa. En dicho comunicado se informaba de que había sido realizada con éxito la prueba de una bomba nueva, de poco tamaño y formidable potencia.  Se trataba de una bomba mixta de explosivo convencional y una pequeña cantidad de material fisionable que habría hecho las veces de fulminante de alto poder sobre la carga de explosivo convencional. Pero los alemanes ya tenían una prueba de la eficacia de sus métodos en el manejo de material nuclear. Y lo que es más importante: ya en 1943 los alemanes hicieron acertadas estimaciones de la potencia de una bomba atómica de uranio.

    De 1943 son los detallados planes nazis de ataque nuclear contra Nueva York ideados por la OKL, la oficina de la Luftwaffe de Hermann Goering, en donde se especificaban exactamente los valores en kilocalorías por kilómetro cúbico del efecto de una explosión nuclear en Manhattan, y que coincidían por completo con la cantidad de kilotones de la bomba que seria usada el 6 de agosto de 1945 sobre Hiroshima.

[size=16pt]"Zielvorschlag New York" (Objetivo Nueva York).[/size]

   

En 1987 se publicó una obra que hoy es ya un clásico: "Waffen und Geheimwaffen des deutschen Heeres. 1933-1945."

El autor es el historiador Fritz Hahn que pertenece sin la más mínima duda al campo de la historiografía más académica y oficial.

En la página 168 del tomo II se encuentra reproducido el siguiente documento:

Nos encontramos pues, ante un documento perfectamente conocido y aceptado como auténtico, por la más rigurosa historiografía oficial.

    Este plano se realizó en Alemania en 1944 y se le relaciona en todo momento con los proyectos que surgieron aquel año para bombardear Nueva York con cohete como el A-9/A-10 o con aviones espaciales como los concebidos por Eugen Sänger. Según los historiadores oficiales, estos ingenios habrían transportado cargas explosivas convencionales de una o dos toneladas.

    Pero para lanzar esas dos toneladas sobre América se requería un costoso cohete de 100 toneladas de peso. Un arma tan antieconómica sólo podría haberse usado a muy pequeña escala y con un impacto más psicológico que militar. He aquí el motivo de que todos estos proyectos fuesen cancelados, concluyen los historiadores ortodoxos.

    Pero si se fijan con atención en el documento, verán que éste nos cuenta una historia MUY DIFERENTE.

    Como se puede ver nos encontramos ante un mapa que indica la densidad de distribución calorífica (en kilocalorías por kilómetro cuadrado) que generaría cierto bombardeo de la ciudad de Nueva York.

Se indica:

La zona circular de daño máximo, que llega hasta los 1,35 km de distancia del centro de impacto.

La zona de daño secundario que alcanza hasta un radio de 4,35 km del centro teórico de impacto.

Un círculo punteado de 2 km de radio, que indica la zona de dispersión probable del impacto, es decir, la zona alrededor del centro teórico de impacto donde el misil caerá probablemente de modo efectivo.

    Lo importante es fijarse ahora en las cifras indicadas. La densidad de cobertura calorífica media en la zona de daño máximo es de 1,4 por 10E8 kcal/kmE2 y en la zona de daño secundario de 7 x 10E6 kcal/kmE2.

    Es decir, que en un círculo de 1,35 km se depositarían 140.000.000 kcal por cada kilómetro cuadrado; o lo que es lo mismo 140.000.000.000 calorías por kilómetro cuadrado (140 mil millones).

Con ayuda del gráfico es fácil calcular la energía calorífica total que se habría depositado:

Zona de daño máximo 7,435 x 10E8 kcal.

Zona de daño secundario 3,695 x 10E8 kcal.

Energía calorífica total depositada 11,130 x 10E8 kcal.

    En una explosión nuclear típica, aproximadamente entre el 6 y el 8% de la energía desprendida se irradia sobre las superficies adyacentes. Sabido esto y conociendo la equivalencia en calorías de un kilotón (un kilotón o kt equivale a la fuerza explosiva de 1.000 toneladas de TNT, que equivalen a su vez aproximadamente a 1,12 x 10E12 colorías) es fácil estimar la potencia de la bomba que habría generado la onda de choque térmica del mapa.

Los valores que se obtienen están entre los 14 y los 18,8 kt.

Algunas consideraciones:

a) Es por supuesto completamente imposible producir los estragos que muestra el plano usando cohetes con cabezas convencionales de una o dos toneladas, a no ser que se usen muchos miles simultáneamente.

b) Toda explosión atómica produce tres efectos principales: onda de choque, efecto térmico y radiaciones. Pero es el calor el que causa el 60% de las muertes en toda explosión mayor de 10 kt.

Este es el motivo por el que los científicos alemanes se limitaron a indicar el alcance letal de los efectos térmicos. En la zona de daño máximo se depositan 14 calorías por centímetro cuadrado (14 cal/cmE2). Dado que con 10 cal/cmE2 ya se producen quemaduras mortales de tercer grado, se comprende que lo que el mapa nos indica es el área en el que la tasa de mortalidad habría sido prácticamente del 100% (toda la parte central y sur de la isla de Manhattan).

c) Los parámetros de este artefacto se parecen a los de la bomba de Hiroshima de modo "asombroso":

La mayoría de autores estiman la potencia de Little Boy entre 15 y 20 kt.

En Hiroshima se depositaron 10 cal/cmE2 hasta un radio de 1,6 km (Encyclopedia of Sciencie & Technology. Volumen 12, página 130. Editorial Mc Graw Hill).

    Haciendo una breve extrapolación lineal vemos que este artefacto habría liberado unos 11 cal/cmE2 en ese mismo radio.

d) En definitiva podemos ver que los autores del documento que nos ocupa tenían un conocimiento preciso de los efectos del artefacto que habían planeado lanzar.

Pero la bomba atómica era un arma completamente nueva y revolucionaria cuyos efectos exactos no se podían prever con tanta precisión.

Mapa

Cohete intercontinental A9/A10

[size=16pt]Hitler tranquiliza a Mussolini.[/size]

   En Abril de 1944 tuvo lugar una importante reunión en el castillo de Klessheim de Salzburgo, a la que asistieron Benito Mussolini, Adolf Hitler, el mariscal Rodolfo Graziani, Von Ribbentrop, Keitel, Dollman y el embajador de Alemania en Italia, Rhan.

    Con objeto de tranquilizar a su aliado, Hitler le transmitió una información extraordinaria, corroborada por varios testigos en declaraciones hechas tras la guerra.

    Hitler dijo: "...tenemos aeroplanos a reacción, tenemos submarinos no interceptables, artillería y carros colosales, sistemas de visión nocturna, cohetes de potencia excepcional y una bomba cuyo efecto asombrara al mundo. Todo esto se acumula en nuestros talleres subterráneos con rapidez sorprendente. El enemigo lo sabe, nos golpea, nos destruye, pero a su destrucción responderemos con el huracán y sin necesidad de recurrir a la guerra bacteriológica para la cual nos encontramos igualmente a punto. No hay una sola de mis palabras que no tenga el sufragio de la verdad. ¡Veréis!..".

Continuará...

Deleted member

01-08-2006

Realmente excelente tu iniciativa P47. Espero que continúe de verdad, por que esto es realmente interesante... lo he disfrutado mucho sin duda alguna...

En cuanto a las palabras de Hitler en el final del artículo diré que no hay nada peor que las mentiras propias cuando uno mismo acaba por creerselas.

P47DThunderbolt

02-08-2006

Gracias karl. la segunda parte

[size=16pt]Test atómico en la Isla de Rügen.[/size]

    A principios de Octubre de 1944 el periodista italiano Luigi Romersa, ya famoso por su reportaje sobre la liberación de Mussolini efectuada un año antes por tropas especiales alemanas, recibía del Duce una misión extremadamente importante: viajar a Alemania con objeto de informarle de los avances realizados en el Tercer Reich en el campo de las armas secretas.

    El periodista fue llevado a visitar las instalaciones subterráneas de Turingia, las rampas de lanzamiento de las todavía desconocidas V-2, y lo que seria más importante: una prueba de la bomba atómica alemana totalmente operativa.

    En varios artículos escritos desde 1947 en prestigiosas revistas militares europeas, el periodista Luigi Romersa declaró ser testigo de una prueba nuclear alemana el 12 de octubre de 1944 a las 11:45 AM en la isla de Rügen, en el mar báltico y próxima a la base de Peenemunde, donde se realizaron la mayor parte de las investigaciones sobre cohetes.

    La magnitud de la explosión atómica fue captada fotográficamente desde varios lugares de la costa báltica, y la onda sísmica provocada por la detonación fue detectada en la distante Estocolmo.

Dos meses después, el 16 de Diciembre de 1944 un entusiasmado Mussolini pronunciaría su ultimo discurso publico ante miles de fascistas en el teatro lírico de Milán, anunciándoles el inminente ataque germano contra las principales ciudades aliadas, un ataque definitivo con bombas y cohetes de potencia extraordinaria, bombas con capacidad de destruir ciudades enteras en un instante.

    El 20 de Abril de 1945 Mussolini volvería a hablar de las bombas atómicas alemanas. Llama al periodista G.G. Cabella, antiguo amigo y director del periódico "il popolo d´Alessandria", y le dicta el que seria después considerado como "testamento político" del Duce. Mussolini afirma con rotundidad en la entrevista que los alemanes tenían ya tres bombas terminadas, y que su uso puede suponer un vuelco de la situación.

    Al menos un documento oficial desclasificado hace referencia a la prueba de Rügen: El 24 de enero de 1946, un piloto de la Flak antiaérea alemana llamado Ziesser es interrogado por el capitán Helenes T. Freiberger de la inteligencia americana. Dicho piloto hace una descripción detallada del lugar y momento del test nuclear, que coincide exactamente con el informe de Romersa.

Comparativa tamaño ... de izquierda a derecha, la V1, la V2, delante de esta el avión cohete Messesrchmit Me 163 "Komet"  todas armas secretas

[size=16pt]Un He177 preparado para la guerra atómica:[/size]

    En las factorías Skoda en Praga, Chekoslovaquia, se preparó oficialmente un misterioso avión, el Heinkel He 177-A5 Greif prototipo V38 dotado de un sistema de bombardeo a gran altitud, inusual en la Luftwaffe, y equipado también con un complejo sistema externo de enganche de bombas, protección anti-radiación, un sofisticado equipamiento electrónico y una estructura de operación muy similar a la que equipaba al americano B-29 Enola Gay, que en Agosto de 1945 lanzó la bomba atómica de Hiroshima.

    Dicho He177 modificado ha levantado siempre dudas respecto al alcance del programa nuclear alemán entre los historiadores y los aficionados a la historia de la aviación. El alcance de vuelo de dicha versión modificada del He 177 era superior a los 6500 kilómetros, con una carga útil de cinco toneladas en bombas. Suficientes prestaciones para llegar a Nueva York, ciudad situada a una distancia prácticamente equidistante, desde el centro de Europa, a la remota y deshabitada región siberiana de Tunguska. En el último plan de vuelo de aquel He177 figuraba un viaje al aeropuerto militar de Kristiansand, en Noruega.

Heinkel He 177 y su configuración para llevar una bomba atómica

[size=16pt]La misteriosa explosión de Tunguska.[/size]

    El 30 de Junio de 1908 un gran meteorito cruzaba los cielos de Siberia central. Su impacto fue visible en muchos kilómetros a la redonda, y aparentemente sus efectos provocaron extraños sucesos luminosos en todos los cielos del mundo y quedo también registrado en los sismógrafos de Londres.

    Aunque hay quien asigna el fenómeno de la luminosidad a la explosión del volcán peleano de Colima en México, ocurrida también en 1908. Ese año fue especialmente activo, con numerosas erupciones volcánicas y grandes terremotos como el de Messina en Italia. también parecen existir errores graves de datación de todos esos registros, que no tienen en cuenta la diferencia de varias semanas entre el calendario gregoriano occidental y el usado entonces por los rusos. No existe documentación publicada anterior al año 1946 referente al fenómeno de Tunguska ni dentro ni fuera de Rusia. Solo algunas notas de los diarios de 1904 a 1910 reportando la visión de la caída de varios meteoritos perdidos en aquella remota y despoblada región de Siberia.

  Bajo el epicentro de la explosión, los árboles permanecen milagrosamente de pie, al llegarles verticalmente la onda de choque. Igual que en Tunguska, donde los árboles del epicentro permanecen aún en pie a pesar de las décadas pasadas.

    La explosión de Tunguska es también parecida a la de Hiroshima en la cota de explosión: la topología de la zona y el mapa del efecto muestran que la catástrofe es parada por un monte con una altura de apenas seiscientos metros sobre el fondo del valle: el hipotético "meteorito" de Tunguska explotó a unos 600 metros de altitud. La de Hiroshima explotó a 565 metros.

    El radio de destrucción total es de un kilómetro y medio, aunque aún es posible rastrear los efectos de la onda de choque a más de diez kilómetros de distancia. Todas las fotografías existentes de Tunguska muestran un espectáculo idéntico: la devastación sin precedentes de una gigantesca masa forestal.

    Dichas fotografías son al menos de 1927, según las propias fuentes soviéticas , año en el que según se dice Leonid Kulik descubrió el sitio tras realizar su prosaica y afortunada expedición en trineo, atravesando miles de kilómetros de bosque impenetrable. Las fotografías aéreas son, según las fuentes, algo más tardías, de finales de los años treinta. Sin embargo ofrecen el mismo espectáculo: desolación total, ninguna recuperación forestal a pesar de haber transcurrido más de treinta años del suceso.

    A partir de 1946, la recuperación del bosque de Tunguska parece casi instantánea, al igual que ocurrió en los años siguientes al bombardeo de Hiroshima, por efecto de la radiación. Una milagrosa respuesta retardada de la naturaleza?

Todo parece indicar que la explosión de Tunguska no pudo ocurrir en 1908: Se trata de una sofisticada falsificación de los servicios secretos de Stalin, que ocultaron las huellas de la misteriosa deflagración tras la cortina de humo de la caída de varios metereoritos ocurrida a principios de siglo en un área indeterminada de Siberia

Continuará...

Deleted member

02-08-2006

    A partir de 1946, la recuperación del bosque de Tunguska parece casi instantánea, al igual que ocurrió en los años siguientes al bombardeo de Hiroshima, por efecto de la radiación. Una milagrosa respuesta retardada de la naturaleza? Todo parece indicar que la explosión de Tunguska no pudo ocurrir en 1908: Se trata de una sofisticada falsificación de los servicios secretos de Stalin, que ocultaron las huellas de la misteriosa deflagración tras la cortina de humo de la caída de varios metereoritos ocurrida a principios de siglo en un área indeterminada de Siberia

Hasta ahora todo era muy bueno, sobre todo la información de la isla de Rügen y el He177.... pero esto último no se... en fin, esperaremos el desenlace.

P47DThunderbolt

02-08-2006

Ok Karl, a mi también se me hizo conspiranoico, ya lo borré  :-\ :-\

[size=16pt]si fue cierto ¿Porqué bombardear Tunguska?[/size]

Cuando en 1943 le fue mostrado a Adolf Hitler el funcionamiento del nuevo y revolucionario caza a reacción Me262, reaccionó de una forma aparentemente ilógica: decidió convertir el nuevo caza en un bombardero táctico, ante la sorpresa y consternación de los militares presentes. Hitler veía en aquel caza la posibilidad de mostrar a sus enemigos que aún podía atacarles y bombardearles con total impunidad, al igual que hacían los aliados usando los gigantescos raids de bombarderos que azotaban Alemania.

    Otro tanto ocurrió con el misil V-2. Aun siendo una maravilla técnica, militarmente la V-2 fue un fracaso absoluto. Provocó más muertos entre las tropas encargadas de su manejo y construcción que como resultado de su impacto en territorio enemigo. Muchos, entre ellos el propio ministro de armamentos Albert Speer, sabían que en aquellos momentos el programa de cohetes era un inmenso gasto superfluo para el Reich, pero Hitler lo veía de otra manera.

    La V-2 era para él un "arma diplomática", un instrumento que podía forzar a los aliados a una tregua o a firmar una paz provocada por el miedo. Hitler nunca envió las V-2 contra los soviéticos, ya que simplemente no consideraba que esa fuera una medida de presión contra Stalin y su ejército, disperso y casi indiferente a la destrucción y las perdidas humanas.

    El Führer era un obseso de la geopolítica. Para él, cualquier acción podía tener consecuencias políticas indirectas, tan barrocas e imprevisibles que pocos en su entorno eran capaces de detectar o adivinar. Este mismo criterio le empujó a firmar el pacto de no agresión con Rusia en 1939, a declarar la guerra a los americanos en 1941 para así presionar a los japoneses a un ataque contra la retaguardia Rusa, o a retirar las mejores tropas SS de la batalla de Kursk en su punto álgido y enviarlas a Italia, con objeto de reforzar la moral de los italianos aun leales a Mussolini tras su derrocamiento de 1943. Así era Hitler.

    Para Hitler la bomba atómica era en esencia otra "arma diplomática" para cambiar de raíz el curso de los acontecimientos y descubriendo por primera vez una forma de hacer política que más adelante todo el mundo llamaría "política de disuasión nuclear". Bombardear una remota y deshabitada región de Siberia ofrecía varias ventajas, seguramente inexplicables para cualquiera que no estuviese familiarizado con la psicología del jefe del Reich.

    No había forma de dañar seriamente a los soviéticos con una sola bomba atómica, ya que su industria y su ejército estaban dispersos por la inmensidad soviética.

    Otra cosa habría sido que Hitler hubiera dispuesto de varios cientos de bombas como la de Hiroshima, que, bien empleadas en el frente del este podían haber desintegrado buena parte del ejército Ruso. El riesgo que corrían los alemanes era mínimo, en caso de que la bomba no explotara al ser lanzada sobre Tunguska . El artefacto atómico quedaría perdido en el denso y desierto bosque siberiano, sin posibilidad de ser recuperado y reutilizado de forma inmediata por los soviéticos.

    Bombardeando intencionadamente una zona desértica de Siberia, Hitler evitaba incrementar el odio y la represalia que las tropas rusas, ya en territorio alemán, estaban mostrando contra la población y el ejército germano conquistados. Con la explosión en Tunguska advertían a Stalin y sus aliados de la existencia del arma atómica.

    El objetivo de Hitler era esencialmente otro: persuadir a los anglo-americanos de que era mejor firmar un acuerdo, o de lo contrario podía bombardear Nueva York o Washington, objetivos aéreos equidistantes a la lejana Tunguska, si tomamos como punto de referencia el centro de Europa. Hitler confiaba en que los rusos hablaran inmediatamente a los americanos de la explosión de Tunguska, y que después ellos sacaran conclusiones al medir las distancias, y descubrieran que podían ser susceptibles a un ataque atómico nazi.

    En la mente de Hitler, Tunguska era por tanto el sitio ideal para dejar caer la primera bomba atómica operativa de la historia, una bomba idéntica a la de Hiroshima.

    Pero una vez más, sus sofisticadas expectativas geopolíticas chocarían con el pragmatismo elemental de sus enemigos angloamericanos y rusos, que rara vez cedieron o entendieron las complejas maquinaciones políticas hitlerianas. El Jefe del Reich de los mil años aun tendría fuerzas para organizar su ultima "gran jugada geopolítica", quizá la más exitosa, a la vista de las fuertes polémicas, la represión y censura que aun suscita lo "nazi", y los millones de admiradores del nacional-socialismo que hay en el mundo casi sesenta años después: la creación del mito histórico de la resistencia del régimen nazi en Berlín hasta la aniquilación total.

[size=16pt]Hitler promete la victoria final.[/size]

   

En su ultima alocución radiada del día 23 de Febrero de 1945, el propio Adolf Hitler promete la victoria final, mientras declara, en boca de un dramático Joseph Goebbels, que pide a Dios que le perdone por hacer uso de un arma demoledora y definitiva. Esa misma mañana ha tenido conocimiento de la misión exitosa del Heinkel He 177 que había despegado doce horas antes desde un aeropuerto en Checoslovaquia. Optimista por la prueba atómica, se atreve incluso a visitar personalmente a sus tropas, que se baten en el frente del Oder.

    El ambicioso plan pretende mostrar a los aliados el poder de la nueva arma, así como el radio de bombardeo aun posible de la aviación nazi, con objeto de forzar una tregua en ambos frentes del conflicto.

    Hitler pensaba que la a practica equidistancia de Tunguska a Turingia y de Nueva York a Kristiansand (el punto de Europa bajo control alemán más cercano a la costa este americana ) forzaría a los americanos a pensar en la posibilidad de una ataque alemán contra alguna superpoblada ciudad de la costa este estadounidense.

    Simultáneamente se comunica al neutral gobierno español del peligro colateral y no intencionado que pueden sufrir algunas ciudades fronterizas españolas con Francia, a consecuencia del uso de las nuevas armas. En aquellas fechas los puertos franceses de Burdeos, Niza, Tolon y Marsella, próximos todos ellos a España, estaban siendo usados masivamente por la flota angloamericana, y por tanto se convertían en objetivos prioritarios de un posible bombardeo atómico alemán.

    Pero Stalin calla, y no comunica el ataque nuclear sufrido en Tunguska a sus aliados angloamericanos. Sus tropas se encuentran ya muy cerca de Berlín, y sabe que incluso un ataque generalizado alemán contra Rusia tendrá poco efecto sobre la maquinaria bélica soviética: sus principales ciudades están ya destruidas, ha perdido veinte millones de rusos a manos alemanas y su industria esta dispersa por las inmensidades de Siberia. No hay posibilidad de un ataque concentrado contra los rusos para ese tipo de armas, a no ser que la Alemania nazi disponga de cientos de bombas como la de Tunguska.

    A los pocos días Stalin comprueba que no hay ataque atómico masivo alemán, y ordena al ejército rojo el asalto definitivo a la capital del Reich.

Continuará...

Deleted member

02-08-2006

P47D Thunderbolt, te ordeno que vuelvas a colgar lo que has borrado ;D ;D ;D ;).

Primeramente por que los camaradas que no hayan leído todo como yo no comprenderán la Historia entera... o sea que modificas el mensaje anterior y lo vuelves a pegar... la verdad es que todas estas teorías conspirativas no están mal... quiero decir, son entretenidas de leer, pero nada más allá, me quedo con los datos técnico y algunos análisis muy buenos que se llevan a cabo en el artículo.

Muy bueno Thunder.

Sigue. :)

P47DThunderbolt

02-08-2006

Gracias karl, volveré a colgar lo conspiranoico :D ;D

[size=16pt]Hitler no usa la bomba.[/size]

    Tras el fracaso de las posibles negociaciones con Stalin, y ante la inexistencia de una respuesta angloamericana, Hitler se encuentra en la peor de las situaciones posibles. Su ejército se bate en retirada en el oeste, retrocede sangrientamente en el este y su sistema industrial, que permanece intacto en un 80% en el subsuelo alemán, se ahoga por la falta de suministros.

    Un bombardeo de aviso como el de Tunguska contra los americanos era extremadamente difícil para los nazis: Toda la Europa ocupada por los aliados, así como toda la costa este americana, única zona al alcance de un bombardeo alemán, estaba densamente poblada y podría entenderse el bombardeo como un ataque directo contra la población. Un impacto en el atlántico podría provocar efectos imprevisibles , quizás un maremoto, al no haber sido probada la bomba en el mar. Adicionalmente podía ser mal interpretado como un error técnico alemán o deberse a un fenómeno natural, como la caída de un meteorito. Una demostración en el desierto del norte de África o en Groenlandia podría dar una imagen equivocada de la potencia destructiva de la bomba, como ocurriera en el test de Trinity de Alamogordo: la explosión tan solo destruyó la torre que sostenía la bomba y vitrificó una delgada capa del suelo, dando lugar a un nuevo mineral, la trinitina. Solo le quedaba a Hitler la posibilidad de un ataque directo contra Nueva York u otra gran ciudad de la costa este americana, para forzar una posible paz con occidente, aun cuando las V-2 que ya se lanzaban sobre Londres no conseguían obligar a los ingleses a una negociación.

    Hitler se muestra inseguro: la muerte repentina de quizás millones de personas a consecuencia de un ataque nuclear puede provocar una respuesta indeseada por parte americana. Ante la aplastante superioridad aérea aliada, Hitler teme que los aliados se atrevan por fin a un bombardeo masivo con gases o con armas bacteriológicas, mucho más letal que los bombardeos convencionales que ya sufrían los alemanes en toda su intensidad.

    Además persiste el temor fundado de que los americanos dispongan ya de un arma atómica de características similares, que no haya sido usada aún, por las mismas razones que no se usaban los agentes químicos o bacteriológicos.

    Los norteamericanos no tendrían tantas consideraciones a la hora del bombardeo atómico de ciudades japonesas. Sabían, gracias a la captura del submarino U-234, que los japoneses no disponían ni de bombas atómicas, ni de cohetes, ni de capacidad para una posible respuesta de represalia contra los Estados Unidos, así que podían efectuar el ataque nuclear con total impunidad.

Sin embargo ese miedo a la represalia asegurada si funcionó durante los cincuenta años de guerra fría posteriores, en los que se evitó el uso de armamento atómico gracias a la estrategia mutua de "disuasión nuclear".

    Si Alemania hubiera conseguido terminar la producción de los misiles intercontinentales A-9/A-10 o los bombarderos a reacción de largo alcance Horten XVIII o Junkers E-555, o el bombardero antipodal Sänger, Hitler hubiera podido atacar con alguna garantía a los aliados desde sus bases subterráneas en Turingia, mientras él permanecía atrincherado en su reducto alpino, hasta forzar la deseada tregua.

    También hubiera necesitado el dictador alemán que la producción en serie de bombas atómicas fuera al menos diez veces superior a lo conseguido hasta entonces, apenas dos bombas operativas de plutonio y una de uranio, y material fisionable para otras veinte bombas más...

    El 20 de Marzo cae definitivamente Budapest, y con Hungría caen también las gigantescas factorías Manfred-Weiss, pertenecientes al emporio económico de las SS y lugar donde se ensamblaban las bombas atómicas alemanas. Era tal la importancia de dicha factoría que las cinco mejores divisiones de las SS, más de 70.000 hombres, fueron desplazados desde el sur de Alemania y desde Austria, provocando un rápido avance enemigo en ambos frentes. A pesar de que solo 1.000 hombres de las Waffen sobrevivieron a la terrible lucha en defensa de la Manfred-Weiss, Hitler, en un arrebato de ira, ordena que los soldados de las SS se arranquen las bandas-insignia de los brazos con el nombre del Führer, y desautoriza de su poder a Heinrich Himmler. A partir de entonces, será también el General Kammler el jefe "de facto" de las Waffen SS.

    El 3 de Abril los americanos y los rusos invaden Turingia ocupando las bases y fabricas secretas alemanas. Hitler se reúne urgentemente con Kammler y le hace llegar nuevas órdenes: Aún quedaba una posibilidad de un ataque aéreo contra una ciudad americana desde la base de Kristiansand, en Noruega, enviando un bombardero de largo alcance He177 a recoger un ingenio nuclear llevado allí por el submarino U-234.

    A raíz de la muerte de Roosevelt, Hitler volverá a creer en un cambio radical de la situación, esperando como Federico el Grande el milagro de un posible enfrentamiento inminente entre los aliados occidentales y sus cada vez menos fiables compañeros de armas soviéticos. El enfrentamiento deseado por Hitler solo llegaría tras la melodramática muerte del Führer, y se extendería durante los 50 años siguientes, los años de la "guerra fría".

    El día 15 de Abril, tras comprobar que el nuevo presidente americano Truman continuará las hostilidades, y temiendo una brutal represalia angloamericana, Hitler decide no ejecutar el ataque aéreo contra Nueva York desde Kristiansand. Ese mismo día el submarino U-234 parte del puerto noruego con rumbo a Japón, pero su destino final es incierto, dado el desarrollo que estaban tomando los acontecimientos. La decisión de Hitler de no emplear la bomba atómica provoca una desbandada general entre los altos mandos de las SS y de la Luftwaffe, partidarios ambos del uso del arma nuclear como única alternativa para forzar un pacto a la desesperada con los aliados. Herman Goering anunciará su deseo de negociar con los americanos el día 23 de Abril, lo que provocará su detención por orden de Hitler. Al mismo tiempo Heinrich Himmler se pondrá en contacto con el Conde Bernardotte para negociar una rendición por separado, sin contar con el Führer.

    Hitler centra sus últimos recursos en un final "heroico" para su régimen, con la idea de marcar en la historia universal una resistencia épica sin precedentes, sacrificando hasta el último hombre en la capital del Reich . Pocos días después del suicidio de Hitler, el conde Schwerin von Krosigk, recién nombrado ministro de asuntos exteriores del efímero gobierno del almirante Doenitz, comunica a la agencia de noticias Reuters que "..Hitler no había echado mano de la última arma terrible que el Reich tenía a su disposición..." El día 10 de Mayo el Almirante Doenitz firma la rendición incondicional de Alemania. La guerra en Europa había terminado.

Bombardero antiporidal Sanger

Bombardero Horten Ho XVIII y su configuración para llevar una bomba atómica

Arado E555 sobrevolando Nueva York

Deleted member

02-08-2006

Qué interesante amigo, sea verdad o mentira he disfrutado como un enano leyendo tu artículo... muy bueno, muy de gran novela de ficción pero muy bueno. ;)

P47DThunderbolt

02-08-2006

Gracias Karl, la quinta y última parte

[size=16pt]El Submarino U-234[/size]

El 15 de Abril de 1945 partió desde el puerto noruego de Kristiansand submarino alemán de transporte U-234, de la clase XB, rumbo a Japón, bajo ordenes expresas del Jefe de la Gestapo, Heinrich Müller, y del propio Adolf Hitler. El 13 de mayo del mismo año el submarino alemán decidió rendirse. Por la zona del Atlántico en que se encontraba debía entregarse a los canadienses.

Inexplicablemente, sin embargo, el capitán del navío decidió engañar a los canadienses dando sucesivas falsas posiciones, mientras se acercaba al puerto de Portsmouth (USA). El 16 de mayo de 1945 el destructor americano "USS Sutton" tomó el control del U-234 que sería entregado a las autoridades de Portsmouth el 19 de mayo de 1945.  Desde el principio se reconoció que el submarino transportaba sistemas de armas secretas muy importantes hasta Japón. Entre sus pasajeros figuraban incluso dos oficiales del ejército nipón y un general alemán. Los japoneses se suicidaron tan pronto como el capitán de U-234 les comunicó su deseo de rendirse.  A bordo iban los últimos y más sofisticados avances de la ciencia y tecnología alemanas: un Messerchsmitt 262 desmontado pieza por pieza, componentes vitales de misiles y cohetes, equipos electrónicos de comunicación, radares, las últimas espoletas de proximidad, revolucionarias granadas anticarro, medicamentos contra la malaria... y un sinfín de planos detallados de otros tantos sistemas y equipos de la más reciente tecnología bélica germana. Pero lo más importante es que circulaban intensos rumores de que entre las 240 toneladas de carga había óxido de uranio o como mínimo algo conectado con la energía atómica. hay dos puntos para analizar:

A) ¿Qué cantidad de óxido de uranio transportaba el submarino? ¿Diez contenedores con un total de 56 kg o 10 contenedores con 56 kg cada uno, es decir, un total de 560 kg?

B) ¿A qué tipo de óxido de uranio se refería la lista?

    La pregunta "B" es absolutamente decisiva. El mineral de uranio es rico en el óxido U3O8. Es preciso entender que el U3O8 que se refina a partir del mineral uranífero natural es una sustancia relativamente inofensiva, especialmente en cantidades tan pequeñas como 560 kg. Media tonelada de U3O8 sólo contienen apenas 4 kg del isótopo explosivo del uranio de peso atómico 235, conocido generalmente como U235. Se necesitan de 50 a 60 kg de este isótopo para una bomba como la que destruyó Hiroshima. Extraer el isótopo explosivo U235 a partir del óxido natural U3O8 es un proceso muy complejo conocido como enriquecimiento. El producto final del enriquecimiento es el UO2, un polvo metálico pardusco con una proporción de U235 que varía entre el 3% para los reactores nucleares a más del 90% para las bombas atómicas. 560 kg de UO2 enriquecidos al 90% contendrían unos 450 kg de U235, es decir, suficiente material fisible para nueve o diez bombas.el equipo que era totalmente consciente de la necesidad de aclarar estas cuestiones, solicitó más información sobre el óxido de uranio que transportaba el submarino. Pero el gobierno americano invocó su legislación sobre secretos nucleares y se negó a facilitar ningún detalle más. Los alemanes tuvieron durante la guerra cantidades ingentes de mineral rico en U3O8 a su disposición (más de 1.200 toneladas), algo que por otra parte nunca se ocultó después de 1945.Oras cosas qur hay que destacar son la siguientes:

a) La misión del U-234 era ultrasecreta, pero en la base de Kiel (que es donde el submarino recibió originalmente su carga) todo el mundo sabía al menos una cosa: El destino del navío era Japón. El motivo de esto era sencillo, pues existían dos oficiales japoneses pateando la base a sus anchas, que siempre estaban atentos junto al submarino cuando una nueva carga era introducida en éste.

b) Un día de enero de 1945 Hirschfeld, un marino de la tripulación observó como se habían depositado un montón de pequeños paquetes sobre la proa del buque. Los paquetes eran como cubos de unos 25 cm de arista. Estaban envueltos en algo que parecía papel y era de color marrón.

c) Junto a los paquetes se encontraban los dos oficiales japoneses. Uno de ellos escribía sobre cada paquete "U235" en gruesa tinta negra y a continuación dos marinos alemanes introducían el paquete con visible esfuerzo en un departamento de carga delantero del submarino.

d) Hirschfeld, extrañado por la escena y por el aparentemente estúpido error de los japoneses ( ¡¡Por qué poner "U235" en unos paquetes que transportaba el submarino U-234?!! ) les preguntó el motivo que tenían para escribir aquello. Uno de los japoneses le contestó que era una carga que debía haber ido al Japón con el submarino U-235, pero que éste ya no haría semejante viaje.

    El oficial de comunicaciones creía recordar que el U-235 era un submarino de la clase VIIC incapaz de alcanzar el Japón. Aún así lo comprobó en la 5ª; Flotilla; y en efecto, el U-235 jamás tuvo nada que ver con la isla nipona.

e) Extrañado le comentó todo el incidente al comandante del navío, el cual le dijo:

"¡Por el amor de Dios oficial de comunicaciones, le tengo que ordenar que mantenga usted el más absoluto silencio sobre este incidente y que tampoco vuelva a comentar nada sobre él con los japoneses. Ya se lo aclararé todo en Tokio!".

f) Los marinos del U-234 que ayudaron a cargar los paquetes comentaron que estos eran muy pesados. Su expresión exacta fue: "Eran pesados como el plomo". Se le pregunto a Hirschfeld personalmente por teléfono su opinión sobre la lista oficial de descarga que han desclasificado los americanos. Dijo lo siguiente:

Hablar de cajas ("cases") era absurdo. Los cubos que el vio eran pequeños y sólo se pueden calificar de paquetes.Tampoco la cifra del número de paquetes era correcta. El no los contó, pero había patentemente más de diez.

No supo, ni sabe ahora, que contenían los paquetes. Sólo sabe que eran pesados como el plomo y que los japoneses escribieron sobre ellos "U235".

A los pocos días de llegar a Portsmouth aún no se habían abierto los departamentos de carga delanteros, porque los americanos temían que hubiese "bombas-trampas" escondidas en ellos.Poco después llegaron unos norteamericanos con unos aparatos. Los aparatos parecían dar lecturas positivas al enfocarlos hacia la parte delantera del submarino.Como todo el mundo estaba muy excitado, Hirschfeld preguntó lo que pasaba. Un oficial de inteligencia americano le dijo que los individuos con los aparatos eran científicos con contadores Geiger, que estos contadores indicaban radiación cuando estaban cerca de los departamentos de carga delanteros y que el submarino transportaba uranio.

El oficial americano no dio más explicaciones y pidió la cooperación del personal competente alemán para abrir los tubos que contenían el uranio.

Esta fue la primera vez que Hirschfeld oyó la palabra "uranio" en conexión con la carga del U-234.El oficial alemán que ayudó a sacar los paquetes fue premiado con su liberación y su inmediata vuelta a Alemania.

[size=16pt]Proyecto Manhattan, mayo de 1945: No hay bomba.[/size]

   

El 3 de Marzo de 1945 el senador James F. Byrnes escribió un memorandum dirigido al presidente de los estados unidos en el que le detallaba los resultados del proyecto Manhattan, así como el abusivo coste de dos billones de dólares gastados en el proyecto. Además solicitaba la suspensión de las investigaciones, dado el rumbo de la guerra y del éxito de los bombardeos convencionales. En mayo la desesperación en el proyecto Manhattan es total: hace tiempo que se ha renunciado a la construcción de una bomba operativa de uranio 235, y aunque se ha producido cantidad suficiente de plutonio 239 (unos 15 kilogramos) no se ha encontrado aún el método de hacer implotar la bomba de plutonio.

    Como resultado en Junio de 1945 son muchos los políticos americanos que claman por una finalización inmediata de los gastos disparatados de la investigación atómica, ya que estimaban que la guerra estaba prácticamente ganada y que los brutales bombardeos de los B-29 contra Japón eran presión suficiente para terminar la guerra. Pero al parecer la bomba atómica se había convertido también en un "arma diplomática" para el presidente Truman: su uso impune forzaría una rendición instantánea del Japón y sería un serio aviso contra el peligroso expansionismo soviético.

[size=16pt]60 kilos de U235 sobre Japón.[/size]

    El 16 de Julio los científicos del proyecto Manhattan hacen explotar su primera bomba en Alamogordo, una bomba de plutonio. No hubo más pruebas, la bomba de plutonio funcionaba.

    Sin embargo, lo que cayó sobre Hiroshima el 6 de agosto de 1945 no fue una segunda bomba de plutonio. Era una bomba conteniendo 60 kilos de uranio 235. Una bomba que jamás había sido probada y de la que se desconocían los efectos de su explosión. Más tarde, ante las sospechas que provocó la falta de pruebas previas realizadas con la bomba de uranio, los responsables del proyecto Manhattan argumentaron que se trataba de una bomba mucho más simple que la de plutonio, que al igual que en un fusil se activaba disparando una carga subcrítica de uranio sobre otra masa subcrítica. Afirmaban que estaban tan seguros de la explosión que estimaban que no era necesaria una prueba previa. Se desconocía si la bomba de 60 kilos de uranio era más potente que la bomba de 15 kilos de plutonio probada el 16 de Julio. No se sabía tampoco si podía provocar la temida reacción en cadena atmosférica, extendiendo su efecto a todo el planeta.

    A pesar de todas estas importantísimas cuestiones la bomba es dejada caer sobre la ciudad japonesa antes que la ya probada de plutonio. Existía otro grave riesgo: para provocar el máximo daño con la explosión, el mecanismo de disparo de la bomba debía detonar a unos 600 metros del suelo, lo que se conoce como "ground zero". Para ello la bomba llevaba un delicado sistema de presión atmosférica controlado por un circuito electrónico muy sensible.

    La bomba debía ser montada y armada en vuelo, pocos minutos antes de ser lanzada, con objeto de que la radiación emitida por el hiper-activo uranio 235 no dañara los circuitos de disparo y provocara el ingenio no explotase en el momento adecuado, o lo que es aún peor, que diera lugar a una explosión precipitada en vuelo. A eso hay que añadir el riesgo estadístico: casi un diez por ciento de las bombas convencionales lanzadas durante la segunda guerra mundial no explotaron. Además la bomba llevaba un pequeño paracaídas que frenaba su descenso, con objeto de evitar que una variación de presión por la velocidad de caída la hiciera explotar en una cota inadecuada. Eso significaba también que la bomba, de no explotar, caería intacta en el bando japonés.

    El hecho de que la bomba de uranio pudiera caer sin explotar en manos enemigas podría acarrear consecuencias gravísimas e imprevisibles: los japoneses tendrían a su disposición 60 kilos de uranio 235 puro, que podrían usar rápidamente en un ataque de respuesta contra los estados unidos. El grado de avance del programa nuclear japonés estaba lo suficientemente desarrollado como para entender la mecánica de la bomba de Hiroshima. De hecho, al finalizar la guerra fueron incautados a los japoneses dos ciclotrones y al menos cinco reactores nucleares en construcción en Japón y Corea, aunque el estado de desarrollo de dichos reactores es todavía un misterio no desclasificado por el gobierno de los estados unidos. También se requisaron a los japoneses varios cazas y cohetes operativos idénticos a los usados por los alemanes.

    Es fácil encontrar documentación sobre el proyecto de la bomba de plutonio. Cada una de las fases de su desarrollo esta suficientemente explicada en miles de artículos y declaraciones efectuadas por los artífices del proyecto Manhattan. Sin embargo, es mucho más difícil encontrar documentación desclasificada de la bomba de uranio lanzada sobre Hiroshima.

    Dicha bomba y su uso sigue provocando entre historiadores y expertos agrias discusiones acerca de su verdadera naturaleza. Pero la contestación definitiva a todas las cuestiones suscitadas puede ser resuelta con una sencilla explicación: la bomba de uranio de Hiroshima ya había sido probada con anterioridad por los alemanes en un remoto bosque siberiano.

La tripulación del U-234 se rinde

Esquema de la bomba nuclear

Los cuatro diseños de bombas nucleares alemanas

El "Enola Gay" poco después de lanzar su bomba nuclear llamada "Little Boy" sobre Hiroshima (6/8/1945)

Imagen artística de el lanzamiento de la bomba de plutonio bautizada "Fat man" sobre Nagasaki (9/8/1945)

Espero k les haya gustado ;D ;D

Hiwi

03-08-2006

muy bien, enhorabuena P47DThunderbolt  ;)

P47DThunderbolt

03-08-2006

Gracias Hiwi ;D ;D

Fuente: http://sgm.zonadictos.net/

Totenkopf

08-08-2006

Este mismo tema lo debatimos yo y Nonsei en el antiguo foro, al final parece ser que el texto tiene mitad de cierto y mitad de falso, todo parece indicar que los Alemanes desarrollaron su proyecto mas allá de lo que se pensó, los soviéticos coparon las bases subterraneas de Turingia y todo el avance en el proyecto fue absorbido por el plan atómico soviético, lo cual les permitió tener una bomba atómica unos pocos años despues, pero por lo que me mostró Nonsei es casi imposible que los Alemanas hayan lanzado una bomba sobre la URSS, aunque quien sabe.....

Deleted member

08-08-2006

Como yo ya había dicho es técnicamente imposible... menudo tontería, pensar que los hechos de Tunguska fueron producto de una bomba atómica alemana.

P47DThunderbolt

08-08-2006

eso si, lo de Tuguska es totalmente conspiranoico, totalmente de acuerdo Karl, lo que me llevó la atención para colgar este artículo fue los planos, armas secretas, datos, aviones, el U-234, Hitler mintiendo (quien sabe ;)), etc. 

¿Que tal les parecieron mis imágenes?

Deleted member

09-08-2006

Estoy de acuerdo amigo, aquí hay muy buen material.

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