15-02-2007
Scapa Flow, el Kaiser Guillermo II y la luna.
Todos se preguntaran que pueden tener en común entre si estos tres “elementos”, y sin embargo la tienen y mucho, pero comencemos por el principio.
Para los amantes te la temática sobre las guerras mundiales Scapa Flow, fondeadero situado en las islas orcadas, en el noreste de Escocia, es conocido como el emplazamiento de la principal base naval británica durante ambas contiendas mundiales, y sobre todo por la gesta de Günther Prien, hundiendo el HMS Royal Oak.
Del Kaiser Guillermo II podríamos hablar mucho, pero en este caso solo nos interesa su flota.
Tras la derrota Alemana de la Primera Guerra Mundial, su flota presentaba un desafío para los aliados, el armisticio requirió que esta fuese internada bajo vigilancia británica. El 25 de Noviembre de 1918, los buques de guerra alemanes entraron en Scapa Flow y fondearon entre las islas Cava y Fara. En total había unos 74 barcos de los cuales 11 eran acorazados, 5 cruceros de batalla, 8 cruceros y 50 destructores.
Así pasaron siete meses, hasta que el 21 de junio de 1919 la flota británica salió para hacer ejercicios en el mar del norte, ese momento fue aprovechado por el oficial al mando de la flota, Ludwig von Reuter, para dar la orden, previamente establecida, de hundir las naves.
Reuters fue aclamado en Alemania como un héroe nacional por salvar el honor de la flota impidiendo que se apoderaran de ella los Aliados. Los británicos intentaron juzgarlo pero no pudieron, ya que la flota no había sido rendida.
Ese día se hundieron 51 naves, siendo estas:
Diez acorazados: SMS Bayern, SMS Kronprinz Wilhelm, SMS Markgraf, SMS Großer Kurfürst, SMS Prinzregent Luitpold, SMS Kaiser, SMS Kaiserin, SMS Friedrich der Große, SMS König Albert y el SMS König.
Cinco cruceros de batalla: SMS Hindenburg, SMS Derfflinger, SMS Seydlitz, SMS Moltke y SMS Von der Tann.
Cinco cruceros: SMS Cöln II, SMS Karlsruhe II, SMS Dresden II, SMS Brummer y SMS Bremse.
Cuarenta y cuatro destructores fueron hundidos.
El acorazado SMS Baden, así como los cruceros SMS Nürnberg II, SMS Frankfurt y SMS Emden II y 6 destructores fueron varados o se evito su hundimiento por parte de la guardia británica, que intentó evitar la acción. Durante la misma fallecieron 8 marinos y un oficial germanos a manos de los británicos. Fueron las últimas bajas de la Primera Guerra Mundial.
SMS Seydlitz
SMS Derfflinger
Disposición de los hundimientos.
Llegados a este punto ya vemos la relación entre las dos primeras, Scapa Flow y el Kaiser, pero ¿que tendrá esto que ver con la luna?. Pues ahora veremos que la tiene.
En 1922 Ernest Cox, se planteó la idea de poder sacar beneficio de la flota hundida, y comenzó la compra de los mismos.
La recuperación de los restos fue complicada y la inexperiencia en este sentido se hizo notar, siendo el método de prueba y error el elegido para las operaciones, se comenzó por los destructores, utilizando muelles flotantes y cadenas. El primero de ellos en ser rescatado fue el V-70 en agosto de 1924. Para finales de 1925 18 destructores mas fueron recuperados. El año siguiente comenzaron los trabajos sobre los barcos más pesados siendo el primero el Hindenburg, pero este tipo de buques representaba un nuevo reto, ya que todo lo anterior no valía y hubo que volver a comenzar desde cero. La solución que se adoptó fue la de parchear los agujeros del casco y bombear aire al mismo, haciendo lo flotar boca abajo, la teoría era en apariencia buena pero la realidad demostró que no iba a ser tan fácil, posición irregular de los buques en el lecho marino, mamparos que reventaban volviendo a hundirse, medios de trabajo en condiciones pésimas de visibilidad y seguridad. No fue hasta junio de 1927 cuando se rescató el Moltke, paradójicamente fue una empresa alemana la encargada de remolcar los barcos hasta Rosyth para su desguaze. Pero el negocio no lo fue tanto y Cox tuvo que vender su negocio en 1933 a la compañía Alloa ante las perdidas. Los trabajos continuaron hasta 1939, en que la inminente guerra que se avecinaba absorbía todos los recursos. Después de la guerra se recuperaron tres buques mas, y estos son los que nos interesan para nuestra historia: Koenig, Markgraf y Kronprinz Wilhelm. Actualmente hoy en día aún hay 8 buques hundidos de la flota alemana en Scapa Flow.
Mapa de los hundimientos antes del rescate de los tres últimos.
Realizando trabajos en el casco
Remolcando el Bayern
El Derfflinger
Con el final de la segunda guerra mundial llegó la era atómica
Se necesita mucho aire para fabricar acero, y todo el acero fabricado después de Hiroshima alberga algo de la radiación producida en las explosiones atómicas al aire libre; el anterior a 1945 no.
No existe ninguna ventaja en su utilización para usos ordinarios, ya que es mucho más barato fabricar acero nuevo, pero para monitores de radiación extremadamente sensibles como los empleados en naves espaciales, ese acero fabricado antes de la explosión de Hiroshima resulta indispensable.
El equipo que la misión Apollo dejó en la Luna, así como parte de la sonda Galileo que llegó a Júpiter y hasta la sonda Pioneer que ya ha superado la órbita de Plutón y se encamina hacia las profundidades siderales, todos ellos contienen parte de la flota del Kaiser, ese acero recuperado en Scapa Flow.
Fuentes consultadas:
http://atschool.eduweb.co.uk/jralston/rk/scapa