El 24 de octubre de 1929, la Bolsa de Nueva York se desplomó estrepitosamente. Ese día, bautizado como el ‘jueves negro’, fue el principio del fin de unos años de prosperidad en los que la economía norteamericana se había convertido en la más potente del mundo. Por eso, su crisis tuvo un efecto dominó que arrastró a muchos otros países y llevó a millones de trabajadores al paro
Corrían los años 20 cuando la economía norteamericana llegó a convertirse en la más sólida del mundo. Comenzaba la era del consumismo; por poner un ejemplo, los coches dejaron de ser unas máquinas raras que se veían a veces por la calle para empezar a producirse en serie, porque todo el mundo quería tener uno.
Pero, en realidad, la producción era mayor que la demanda, y tantos productos se quedaron sin vender que los precios cayeron... y acabaron por hundirse. Eso repercutió en la Bolsa de Nueva York, que hasta 1929 había estado teniendo alzas espectaculares que no respondían a la situación real de la economía.
El 24 de octubre de ese año, la cosa se desmadró: la Bolsa puso a la venta un número anormalmente elevado de acciones (13 millones) que no encontraron comprador, lo que se tradujo en una caída de los precios. Aquel día fue bautizado como el jueves negro, y fue el principio del fin de los años de prosperidad.
Los agentes bursátiles podían exigir a los inversores, en caso de descenso del precio de los valores, una parte del crédito concedido si no podían afrontar el pago de los intereses. Por eso, aquellos días muchos inversores intentaron vender sus acciones para devolver el dinero que se les había prestado, y este proceso acentuó la caída de la Bolsa, cuyo índice se hundió en pocos meses y provocó una oleada de auténtico pánico. Multitud de personas y empresas quedaron arruinadas, y más de un inversor se suicidó, desesperado.
El pánico afectó enseguida a todos los sectores económicos: los bancos quebraban, las empresas no podían sobrevivir sin créditos o por el descenso de los precios... El paro se convirtió en la pesadilla nacional para millones de norteamericanos.
Como te puedes imaginar, Estados Unidos tenía inversiones en todo el mundo, así que la crisis no tardó en afectar al resto de países, especialmente a los europeos.
Consecuencias
ECONOMICAS. Tras el crack de 1929, la producción industrial descendió en todo el mundo, y el comercio tambien. Por ejemplo, la demanda de automóviles, que poco antes habían hecho furor, cayó en picado.
SOCIALES. La repercusión social del paro fue especialmente grave por el escaso desarrollo de los sistemas de protección social. El desempleo prolongado llevó a muchas personas a la miseria. La mendicidad, los asilos de noche y los comedores de caridad fueron el único recurso para miles de trabajadores de países ricos, que nunca habían sufrido una situación semejante.
POLITICAS. Imagínate el descontento general que se extendió por todo Occidente ante semejante situación. El resultado fue que las ideologías antiliberales y anticapitalistas fueron tomando cada vez más fuerza. Por la izquierda, el socialismo y el comunismo, a los que se adhirieron numerosos intelectuales, además de trabajadores. Por la derecha, los fascismos. Todos ellos reclutaban a sus simpatizantes entre las víctimas de la depresión: obreros en paro, agricultores, clases medias sin empleo... al final, en muchos países europeos se impusieron regímenes autoritarios, como el nazismo de Hitler.
LA SOLUCION. En 1932, F. D. Roosevelt se convirtió en presidente de Estados Unidos. Decidido a acabar con la crisis, puso en marcha un plan denominado New Deal (nuevo pacto), que implicaba el intervencionismo del estado, en contra del tradicional liberalismo norteamericano.
Qué son el NASDAQ y el índice Dow Jones
Lo que pasa en Wall Street nos afecta a todos, ya sea el 24 de octubre de 1929 o el 11 de septiembre de 2001. Por eso hay que saber de qué va la cosa. Por ejemplo, habrás oído hablar muchas veces del índice Dow Jones, pero ¿sabes exactamente lo que es? Pues es el índice mas representativo de la Bolsa de Nueva York o New York Stock Exchange (NYSE). Este indicador fue creado por Charles Henry Dow, fundador del diario económico Wall Street Journal.
Otro término al que no le viene mal una aclaración es el NASDAQ, siglas de National Association of Securities Dealets Automated Quotations. Se trata de un mercado de valores creado en 1971 y especializado en empresas con alto potencial de crecimiento. Se ha convertido en uno de los mercados más capitalizados del mundo, debido a empresas tan conocidas como Microsoft.