07-01-2010
Fort William Harrison
La idea de crear una unidad conjunta canadiense-estadounidense de “supercomandos” entrenados para realizar operaciones de infiltración y sabotaje tras las líneas enemigas nació de una visita del general Marshall al primer ministro Chuchill en Chequers en 1942. Inmediatamente se planeó la primera operación para ellos, que consistiría en un salto paracaidista sobre Noruega y un ataque a varias plantas hidroeléctricas de ese país.
La unidad fue bautizada oficialmente con el nombre First Special Service Force, o FSSF (Primera Fuerza de Servicios Especiales), Fue oficialmente constituida en Helena, Montana, el 20 de julio de 1942. Su comandante era el coronel estadounidense Robert T. Frederick.
Los miembros de la fuerza eran todos voluntarios, provenientes de otras unidades de los ejércitos canadiense y estadounidense. El proceso de selección de los hombres fue muy duro. Todos ellos tuvieron que pasar un examen para comprobar si eran aptos y cumplían las condiciones físicas.
Después de pasar las pruebas previas, los voluntarios fueron trasladados al campamento Fort William Harrison, en Helena, Montana, para comenzar su periodo de adiestramiento. Cuando llegaron, el campo estaba todavía en construcción. Al principio había una mezcla de diversos uniformes de ambos países, hasta que se adoptó el uniforme oficial del ejército estadounidense. En total la FSSF la formaron unos 2.500 hombres, divididos en tres regimientos. Aproximadamente un tercio de ellos eran canadienses.
El entrenamiento consistía en tres fases. La primera era entrenamiento en paracaidismo, guerra de guerrillas y adiestramiento en todo tipo de armas de infantería, desde pistolas y fusiles hasta bazookas y lanzallamas. El entrenamiento era intensivo. Por ejemplo, a las 48 horas de comenzar el adiestramiento en paracaidismo daban su primer salto, 24 horas después daban el segundo. Los que no lograban resistir esta primera fase eran reenviados a sus unidades de origen.
La segunda fase consistía en técnicas de demolición y manejo de explosivos, e instrucción de estrategia de combate en unidades tácticas.
La tercera y última fase practicaban escalada, esquí, adaptación a climas fríos, y conducción del vehículo que iba a ser utilizado por la unidad, el Weasel. En principio la unidad había nacido para operaciones en regiones frías, en nieve o alta montaña. Para ese tipo de acciones se diseñó el Weasel, un vehículo blindado ligero que permitiese el desplazamiento sobre terrenos nevados a una gran velocidad.