Toma del Puente Willem – Ataque de Tropas Aerotransportadas en Hidroaviones

Deleted member

30-04-2008

Toma del Puente Willem – Ataque de Tropas Aerotransportadas en Hidroaviones :

La simple ocupación del aeródromo de Waalhaven, era sólo una parte de la operación, pues el verdadero objetivo del desembarco aéreo en Rotterdam era tomar los importantes puentes del Mosa en el centro de la ciudad. Debían tomarse por sorpresa y asegurarlos en ambos sentidos.

Foto de 1934 que muestra los majestuosos puentes de Rotterdam.

El aeródromo de Waalhaven estaba en el extremo suroeste de la ciudad. El 3° Batallón del 16° Regimiento de Infantería (teniente coronel D. Von Choltitz), que desembarcaría en él después de ser asegurado por los paracaidistas del 3° Batallón del 1° Regimiento de Cazadores Paracaidistas (capitán K. L. Shultz), y que tenía como misión el asegurar los puentes del Mosa, debería recorrer varios kilómetros a través del laberinto de calles al sur de Rotterdam para poder llegar a los puentes. ¿No los encontraría volados cuando llegara?

Pero cuando una operación es bien planeada, una eventualidad como esa también debería estar prevista. La víspera del día del ataque (9 de Mayo de 1940), la 11ª Compañía del 16° Regimiento de Infantería al mando del primer teniente Schrader, fue trasladada a Bad Zwischenahn, en Oldemburg. En plena noche y con un destacamento de zapadores del 2° Batallón del 2° Regimiento de Ingenieros, subieron a algunos hidroaviones que les aguardaban.

Luego despegaron del Zwischenahner Meer, que no es ningún mar, sino que un lago circular y desde allí salieron rumbo al Oeste.

Se trataba de doce hidros He-59, biplanos anticuados de flotadores arrastrados que iban cargados al máximo de su capacidad.

Hidroavión He-59.

En algunas unidades costeras se empleaba este tipo de hidroavión biplano para operaciones de salvamento, de reconocimiento o patrulla, pero resultaba inadecuado para fines bélicos, por su lentitud.

A las siete de la mañana del día 10 de mayo de 1940, doce hidros He-59 estaban en el centro de Rotterdam siguiendo el curso del Nuevo Mosa (Nieuwe Maas). Seis llegaron del este y seis del oeste.

En vuelo rasante se acercaron a su objetivo por encima del agua amarando a ambos lados, junto al gran puente Willem. Inmediatamente despegaron dejando enormes estelas en la orilla norte.

Los zapadores sacaron de las compuertas de los aviones unos botes neumáticos que los soldados llevaron hasta las orillas remando enérgicamente. Se encaramaron por los atascaderos de madera, pasando por Oosterkade. Ocuparon los puentes de Leeuwen y Jan-Kuiten entre las viejas dársenas. Luego situaron convenientemente las ametralladoras. Marchando a continuación hacia el sur por el largo puente de Willem, asegurándose su posesión y la del contiguo puente ferroviario.

Tropas alemanas usando botes neumáticos en los canales holandeses.

En cosa de minutos los zapadores e infantes que habían desembarcado de los doce hidros establecieron pequeñas cabeceras de puente a ambos lados del Mosa.

La ciudad tenía numerosas fuerzas holandesas que inmediatamente a atacar a los alemanes, los cuales tuvieron que protegerse detrás de los espolones de los puentes, las barandillas de mampostería y las cornisas. Luego se situaron en las casas de las esquinas y desde allí rechazaron los primeros ataques holandeses.  Pero eran solamente 120 hombres; por grande que fuera su valor, la resistencia que podrían ofrecer era cuestión de poco tiempo.

De repente, en Koningshaven, al extremo sur de los puentes del Mosa, comenzó a sonar alocadamente la campanilla de un tranvía. De su interior saltaron nada menos que ¡paracaidistas alemanes!

Paracaidistas alemanes en las trincheras de Rotterdam.

Era la sección del primer teniente Horst Kerfin de la 11ª Compañía del 1° Regimiento de Cazadores Paracaidistas. Aquel grupo de combate constaba de unos cincuenta hombres y no había saltado sobre el aeródromo de Waalhaven como sus camaradas, sino sobre el estadio de Feijenoord, ubicado al lado sur del lazo del Mosa, y tenían como misión conectar con las tropas del puente Willem. Estos paracaidistas se adueñaron de un tranvía y varios automóviles particulares y taxis, atravesando a toda velocidad el barrio de Feijenoord. En el trayecto Kerfin y en el posterior combate cerca  de “Afrikaanderplein” perdió 14 hombres (entre muertos y heridos).

Los infantes y zapadores respiraron aliviados : habían llegado los primeros refuerzos. La sección de Kerfin podía pasar todavía por el puente y llegar a la cabecera norte del mismo, un sector llamado “Boompjes”. Una hora más tarde no sería posible hacerlo.

Elementos de la 9ª Compañía y de una sección de ametralladoras del 3° Batallón del 16° Regimiento de Infantería, tuvo que abrirse paso desde Waalhaven hacia los pasos del Mosa, enzarzado en fuertes escaramuzas callejeras, y a costa de muchas bajas. Entretanto los holandeses desde sus posiciones a las orillas del río batían el puente Willem, y desde un alto edificio efectuaban un fuego tan nutrido que resultaba de todo punto imposible el paso. Las fuerzas de infantería alemana que acababan de abrirse paso desde el aeródromo pudieron ocupar todavía los pequeños puentes sobre el Koningshaven y la isla que forma el Mosa, llamada Noorder Eilan. Pero sobre el río propiamente dicho, sobre el puente Willem, no hubo tráfico de ninguna clase durante cinco días y cuatro noches. Los paracaidistas y zapadores de la zona norte estaban en una condición tan desesperada casi al punto de la rendición.

Los ataques holandeses realizan ataques muy fuertes sobre la cabecera de puente en el Willem, los que diezman a los alemanes, reduciendo sus fuerzas a no más de sesenta. Recordemos que originalmente eran ciento setenta hombres entre paracaidistas, infantes y zapadores.

En la orilla norte del Mosa quedaba la cabeza de puente formada por esos sesenta hombres, de los cuales 36 eran paracaidistas, que resistieron todos los ataques holandeses. La llegada Inclusive muchos de estos hombres resistieron el ataque aéreo su propia Luftwaffe al centro de Rotterdam. Se dice que Kerfin extendió una bandera alemana para ser visto por los bombarderos, algo bastante difícil.

No se pudo acceder a trafico por el puente hasta que, después del bombardeo, el coronel holandés Scharroo, comandante militar de plaza, cruzó el puente Willem y ofreció la capitulación.

Zona de Rotterdam Bombardeada.

Paracaidistas alemanes tomando prisioneros holandeses en Rotterdam.

Esta operación, según mis conocimientos, debiera haber sido la primera acción de desembarco aéreo de ataque en hidroaviones que se había realizado hasta la fecha.

Fue increíble lo sorprendidos que se sintieron los holandeses, que permitieron que estos doce hidroaviones atiborrados de soldados, hubieran llegado al centro de una ciudad tan importante como Rotterdam, con tanta facilidad, en vuelos rasantes y sin ser atacados por la artillería antiaérea.

Incluso algunos textos indican que los peatones que atravesaban el puente Willem habrían ayudado a algunos soldados alemanes a trepar desde la orilla del río.

Después del bombardeo, Göering visita Rotterdam, siendo recibido por sus paracaidistas.

En junio de 1940, Göering condecora con la Cruz de Caballero al coronel Bruno Bräuer, comandante del 1° Regimiento de Cazadores Paracaidistas, al capitán Fritz Prager, comandante del 2° Batallón del 1° Regimiento de Cazadores Paracaidistas, al teniente Horst Kerfin de la 11ª Compañía del 1° Regimiento de Cazadores Paracaidistas y, al parecer, al coronel Hans Kreysing, comandante del 16° Regimiento de Infantería, respectivamente en la foto.

Fuente :

La Luftwaffe. (C. Bekker)

El Tercer Reich, Vol. 11 “Guerra Relámpago” (Primera Parte), Time Life Rombo.

Rotterdam - Invasión de Holanda. (W. Steenbeek)

Gracias y Saludos.

MIGUEL WITTMAN

01-05-2008

Tema bien tratado Juan Manoel.

Saludos.

TITUS20050

01-05-2008

Muy bueno Juan Manoel tema muy interesante

Deleted member

19-05-2008

Si que en algunas ocasiones las tropas aerotransportadas daban buenos resultados… súper reciba una felicitación.  me imagiuno algo asi:

Deleted member

22-05-2008

buen trabajo Juan Manoel , interesante el uso de los hidroaviones, y buena fotografia de los paracidistas, Filippo

saludos

Balthasar Woll

22-05-2008

Buen trabajo Juan Manoel.

Saludos

Deleted member

26-05-2008

buen trabajo Juan Manoel , interesante el uso de los hidroaviones, y buena fotografia de los paracidistas, Filippo saludos

gracias colega aunuqe la fotografia no pertenesca al tema en cuestion pero es espectacular ver algo asi  saludos

Taylor

28-09-2008

es un gran trabajo, por su puesto que si muy buena la fotografia filippo

montefusco

04-10-2010

Desembarcos en hidroaviones, en avionetas Storch con capacidad para dos personas, planeadores aterrizando sobre un fuerte, definitivamente las operaciones aerotransportadas de mayo de 1940 fueron las más arriesgadas, originales y audaces de la segunda guerra mundial, los alemanes no volverion a repetir algo así y las aliadas fueron más ortodoxas.

Por otro lado hay que señalar que en la concepción alemana el grueso de las tropas aerotransportadas debía llegar aterrizando a los aeródromos en sus Ju-52, no en planeadores y saltando en paracaídas. Por eso las primerass tropas llegadas en estos medios debían asegurar los aeródromos para q aterrice el grueso. Esto tenía la ventaja de no requerir tropas ni equipo especializado y la desventaja de depender de la disponibilidad de aeródromos y de la vulnerabilidad de los aviones al aterrizar. En la Haya fracasaron gracias a q los holandeses fueron avisados antes de hora y en los puentes de Rotterdam fue victoria por los pelos. Lo mismo se puede decir de Creta al año siguiente, q se ganó x la indecisión de Freyberg.

Haz login o regístrate para participar