28-09-2009
A raíz de la lectura de las diversas manifestaciones, plasmadas en el hilo de “La batalla de Krasni Bor”, me ha venido a la memoria, algo que leí, muy por encima, en mi búsqueda de algún material que pudiera serle útil al compañero Armia, cuando solicitó ayuda para lo que luego ha resultado un excelente trabajo sobre la D.A. Localizado de nuevo, os detallo: Se trataba de un artículo aparecido en una publicación divisionaria (“Blau Division”, de la que considero es uno de sus principales colaboradores el escritor Carlos Caballero) de la que me habían regalado varios ejemplares, y que en el correspondiente al mes de Mayo de 1999, se recogía la traducción de un artículo publicado unos meses antes, en la Revista de opinión Panorama, y que en la década de los noventa, se publicaba en la ciudad de San Petesburgo.
En un primer momento, había pensado hacer un resumen del mismo, ó también insertar las partes de mayor interés del tema,pero, para evitar suspicacias, he decidido colocarlo integro, aún a sabiendas de que por su tamaño, me puedo llevar una “amonestación” (la cual acataré disciplinadamente) pero no quiero enrollarme más…
Titulo.- Victoria frustrada. Batalla de Krasnibor.- Autor.- B. Demidov.- Traductor.-V.Ramón L.Perez-Izaguirre.
Entre la innumerable literatura militar sobre la SGM, es universalmente conocida la Operación “ISKRA” (chispa), durante cuyo curso, desde los días 12 al 18 de enero de 1943, se consumó la ruptura del cerco de Leningrado. Sin embargo, de pocos es sabido que esta batalla no finalizó en enero de 1943, sino que fue la primera fase de otra que tuvo su desenlace el 10 de febrero de 1943 con la batalla de Krasnibor.
Es posible que entre los numerosos relatos sobre las batallas defensivas de Leningrado puede que exista alguno con un titulo inadecuado que me haya pasado desapercibido, más por lo que sé, tan solo en 1962 se publicó un libro de memorias titulado “ La defensa de Leningrado”, cuyo autor V.P. Sviridov, tocó de manera fugaz la batalla de Krasnibor.
En este libro, no solo no se refleja lo sucedido en dicha batalla, sino que se ignora la participación conjunta y simultanea, de los ejércitos 54 del frente del Wolchow y 55 del frente de Leningrado. Precisamente, este último lo comandaba el Teniente General V.P. Sviridov, autor del citado libro.
Los autores de la Enciclopedia Militar Soviética, denominaron esta operación “Ofensiva Krasnivor-Smierdinski”, acorde con la denominación de los puntos de partida desde donde desarrollaron su ataque los ejércitos 54 y 55 de los frentes del Boljov y Leningrado respectivamente. Pero si somos rigurosos, diremos que el 18 de diciembre de 1942, con bastante anterioridad a la batalla de Krasnibor, habían sido cursadas las órdenes de operaciones elaboradas y firmadas por la STAVKA, (Mando Supremo), y por ellas se daba el visto bueno a la operación “ISKRA”.
Estos documentos, (Planes de Operaciones y Ordenes del Supremo), aún siendo de la máxima importancia histórica, son difíciles de hallar en los archivos, y a veces, cuando se hallan referencias a ellos, puedes encontrarte con que historiadores “astutos” han trabajado diligentemente con ellos para enmascarar los hechos, presentando el pasado de modo distinto a como realmente ocurrió.
En la referida orden del 18 de Diciembre de 1942, el Alto Mando del frente del Boljow y Leningrado, cursaba las siguientes directrices: “ A las tropas ; romperemos el cerco de Leningrado; se concederá a las tropas designadas a tal fin, 10 días de descanso previo. Durante la primera mitad de febrero de 1943, se llevará a cabo la liberación del nudo de comunicaciones Mga, y al termino de la misma se retiraran las tropas a sus cuarteles de invierno”.
La actividad combativa durante los meses de febrero y marzo del 43, fue registrada en los planes y documentos oficiales con la denominación localista “Operación Krasnibor”.
Sin embargo, esta denominación localista, enmascaraba un vasto plan ó intento general de ampliar definitivamente la precaria ruptura, que ya se había realizado el mes anterior, liquidando las agrupaciones enemigas de Mga y Altos de Siniavino, restableciendo el normal funcionamiento de ferrocarriles y carreteras que comunicaban la ciudad de Leningrado con el resto del país, haciendo realidad el sueño aplazado del Mando Supremo de que el plan del 8-2-43, (fecha aplazada al 10-2-43, por la STAVKA) significara el preludio de una ofensiva de gran alcance estratégico de la que se esperaba, que el ejercito 18 se viera atacado por dos frentes; por los ejércitos 54 del frente del Bojow, desde el Suroeste, y por el ejercito 55 del frente de Leningrado, desde el nordeste.
El Mando Supremo esperaba de esta ofensiva (con ó sin fundamento, es otra cuestión) que en el curso de estas operaciones fueran liberadas las ciudades de Luga, Krasni-Struga, Porchov, Dno, Pleskau…
Este fué el cálculo operativo estratégico del Mando Supremo que aquí intentamos analizar.
Lo que a priori parece cierto es que el Comandante del ejercito 55, Teniente General V.P. Sviridov y otros jefes de su rango, ni se consagraron al estudio profundo del plan de operaciones, ni se distinguieron por su aptitud para la conducción de grandes masas de tropas.
En principio la tarea no parecía muy compleja: Desde el frente de Leningrado la marcha se iniciaría en el sector de Kolpino contra las posiciones comprendidas entre Krasnibor y el delta del Tosmo, teniendo como eje del ataque el ferrocarril de Octubre, cortar las comunicaciones alemanas a retaguardia y según recuerda Sviridov en sus memorias, obligar a los alemanes a retirarse del nudo de comunicaciones de Mga y altos de Siniavino.
Por otra parte, teniendo en cuenta el contexto general de la lucha germano-sovietica en el frente del este, esta ofensiva obligaría a los alemanes a traer refuerzos de otros frentes, susceptibles de ser lanzados para detener la ofensiva soviética en las direcciones Dombas-Briansk-Kalinin, donde por las mismas fechas se hallaban trabados encarnizados combates desde el mes de septiembre de 1941. ¿Cuantos sufrimientos padecieron aquí nuestros soldados? Es imposible evaluar.
Generalmente a los militares historiadores no les gusta recodar los combates que no concluyen con el esperado éxito, pero yo diría que este sector del frente era el epicentro del infierno que supuso el cerco de Lningrado. Baste saber que de septiembre a diciembre de 1941, tan solo entre los jefes de batallón a general, murieron 2.914 hombres en este sector, mientras que en el ejercito 42, colindante por el flanco derecho, sufrieron 517 muertos por las mismas fechas. Durante todo el invierno de 1942, se sucedieron ininterrumpidos ataques, y esporádicamente en primavera y verano, en el sector de Krasnibor, delta del Tosno y poblado de Ivanov. Se exceptúa la pequeña cabeza de puente conquistada en la orilla occidental del Neva, próxima al poblado de Ivanov. De estos combates apenas se obtuvieron resultados positivos , en los 16 meses transcurridos desde el 9 de septiembre de 1941 a 10-2-43.
El General del cuerpo de ingenieros del frente de Leningrado V. Bichensky comunicó al Alto Mando:
“Estamos sorprendidos por las informaciones que tenemos sobre las obras de defensa enemiga. El ejercito 55 de Sviridov no es un cuerpo preparado para una ofensiva de este calibre y de la que tanto esperamos. Sus Divisiones 72 y 43, están anquilosadas por el prolongado tiempo pasado en las trincheras, y no posee suficientes tanques ni tropas de ingenieros para apoyo y desarrollo de la ofensiva”.
Sin embargo, si existían otras circunstancias propicias al optimismo, que daban a las tropas moral de victoria. La ofensiva que un mes antes habían desarrollado con pleno éxito, los ejércitos 67 del frente de Leningrado, y 2º ejercito de choque del frente de Boljow, durante la ruptura del cerco, había elevado la moral combativa de las tropas de ambos frentes.
El sorpresivo ataque y la inusitada violencia del mismo, durante el paso del Neva y en los pantanos y turberas del sudeste del lago Ladoga, inquietaron y forzaron al Mando alemán de la agrupación de ejércitos norte (ejércitos 16 y 18), no solo a traer reservas de donde a duras penas podían, para taponar la peligrosa brecha abierta en el cerco y que amenazaba separar los ejércitos 16 y 18, sino que también se vieron obligados a sacar tropas de otros puntos del cerco, que por ello quedó debilitado y mal guarnecido en su flanco izquierdo.
En los 24 kms. de línea que se extienden desde la villa de Puskin, a los alrededores del poblado de Ivanov, próximo a la confluencia del Tosno con el Neva, las fuerzas del ejercito 55 se enfrentaban, por aquellas fechas, a dos regimientos de la división de infantería 250 (llamada azul) del General Esteban Infantes y a un batallón de la división SS Volkspolizei.
El mando suponía que la nieve y el hielo rusos atenazaba a los ateridos españoles, hasta el punto de que no se esperaba de ellos una gran resistencia, máxime teniendo en cuenta el alud de acero que iba a ser lanzado sobre las posiciones españolas, y pese a que parte de las fuerzas del ejercito 55 estaban contagiadas por la “peste de las trincheras” , expresión de moda en aquel tiempo, para hablar de tropas largamente anquilosadas en la guerra de trincheras. Sin embargo, otra buena parte, como la división 63 de la guardia, aún conservaba el espíritu y la moral ofensiva de los mejores combatientes participantes en la ruptura del cerco.
Para la dirección del golpe principal hacia el ferrocarril de Octubre, poblado de Krasnibor y carretera Leningrado-Moscú, el mando del frente, había designado a la mencionada división de tiradores de la guardia nº 63 del General Simoniak, que se había distinguido en el paso del Neva y que en vísperas de la ofensiva, había cubierto bajas con restos de la división 136, que asimismo había participado en la lucha por la ruptura.
Poco antes de lanzar al ataque sus tropas, Simoniak las arengó, mostrándoles y leyendo orgulloso un telegrama de felicitación del alto mando del frente, firmado por Sdanov: “En los encarnizados combates por la ruptura del cerco a nuestra ciudad, marchando a asalto al frente de todas las fuerzas, atravesó el Neva irrumpiendo en las obras defensivas enemigas, arrollando su resistencia tras enconada lucha… Su división fue la primera que el 18-1-43 enlazó con las tropas de nuestro ejercito 54 del frente del Boljob, rompiendo el cerco de nuestra querida ciudad. Por ello y por su alto espíritu combativo, a Vd. y a sus tropas, damos las gracias en nombre del pueblo de Leningrado, felicitándoles y augurándoles éxito en esta nueva misión.”
Tal era la clase de división que el alto mando del frente había puesto a las órdenes del jefe del ejercito 55, Teniente General Sviridov.
La ofensiva había sido planeada para el 8-2-43, pero por diversas circunstancias, hubo de aplazarse hasta dos días más tarde.