04-02-2014
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A principios de diciembre de 1942, el 8. Ejército Italiano estaba posicionado en la zona del Bajo Don, al noroeste de Stalingrado. El 11 de diciembre de 1942, la Operación "Pequeño Saturno" lanzada por el 63. Ejército Soviético, alcanzó las líneas italianas a lo largo del frente. Los bolcheviques, con la ayuda de tanques, atacaron el sector más débil, defendido por las divisiones "Cosseria" y "Ravenna". Los italianos se retiraron primero para afianzarse en la cabeza de puente de Mamon, donde 15 divisiones enemigas los atacaron sin descanso hasta el 19, cuando un ataque con ataque acorazada rompió las defensas.
Mientras todo esto ocurría, los soviéticos habían rodeado a el 8. Ejército, ya que los húngaros y los rumanos, que les guardaban los flancos, se habían rendido. El 1. Ejército de Guardias atacó el centro de las fuerzas italianas, defendido por varias divisiones. Los soviéticos sufrieron graves pérdidas antes de destrozar el 8. Ejército.
En cambio, las divisiones "Alpini", posicionadas al extremo del flanco izquierdo, no habían sufrido ningún ataque. Aún así, llevaban semanas sin suministros, y la situación no era precisamente favorable, ya que formaban un saliente en el Don. El 14 de enero de 1943, el 6. Ejército Soviético lanzó un ataque hacia las líneas italianas. Las divisiones "Julia" y "Cuneense" fueron destruidas casi por completo. Los soldados del 1. Regimiento "Alpini" quemaron la bandera del regimiento por temor a la captura de las mismas por los soviéticos. Una gran parte de la "Tridentina", además de soldados de las otras unidades, inició una retirada a lo largo del frente para intentar llegar a las líneas alemanas.
Al amanecer del 25 de enero, la columna de los "Alpini" llegó a la ciudad de Nikitowka. Los oficiales que encabezaban la marcha decidieron continuar la marcha, alertados de la presencia de unidades soviéticas cerca, hasta la aldea de Terinkina, donde sus tropas finalmente podrían descansar y preparar el ataque. Las unidades italianas habían sufrido, en su mayoría, grandes bajas en la retirada. Por ejemplo, de la división "Tridentina", sólo estaban aptos para el combate dos batallones, el "Edolo" y el "Tirano". Un tercer batallón, el "Morbegno", resultó destruido en los combates de Charkovka, cuando defendía la columna en retirada de los elementos soviéticos, como retaguardia. Un día, un ataque soviético al flanco izquierdo sorprendió a los italianos, que faltos de cañones anti-tanque, no pudieron incluso defenderse. El pánico se extendía en las filas en esos ataques. Algunos soldados formaron grupos más pequeños, que se desviaban del rumbo principal y resultaron aniquilados.
En las primeras horas del 26 de enero, las patrullas de la avanguardia italiana avistaron Nikolayevka. El comandante de la columna, el Teniente Coronel Policarpo Chierici, estaba decidido a ejecutar el ataque. El pequeño pueblo era el último obstáculo que tenían ante sí. Los soldados italianos esperaron a la órden del ataque agachados en la nieve. No lo tenían fácil, el terreno era apropiado para la defensa de los soviéticos.
Finalmente, el ataque comenzó. Los "Alpini" capturaron el primer objetivo, las vías del tren, sin problema. Las unidades más avanzadas comenzaron a atacar las casas cerca de la Iglesia. De repente, la artillería soviética hizo acto de presencia, y junto a ella, las primeras bajas. Además, los atacantes empezaban a estar cortos de munición. Sin embargo, la batalla por Nikolayevka continuaba, según los presentes, los combates se asemejaban al infierno narrado por Dante. Este en cambio, estaba helado. Cerca de la colina de la Iglesia, cuerpos de atacantes y defensores se desangraban en la nieve blanca o en los cráteres de la artillería. En esos mismos momentos, más tropas "Alpini" llegaron a Nikolayevka: el batallón "Tirano", o lo que quedaba de él, al mando del General Martinat. Según se dice, Martinat, al salir del Cuartel General, observó a su batallón original (el "Edolo") intentando capturar la colina que dominaba el pueblo. Anunció a los presentes : "Con el Edolo empezé, con el Edolo terminaré", y acto seguido, recogió un fusil, y cargó junto a sus soldados contra las posiciones enemigas. Fue muerto en el acto. Por su valerosa acción, se le fue otorgada la Medalla de Oro al Mérito Militar. El General Reverberi, inspirado por la acción que su fallecido compatriota acababa de realizar, se puso al frente de sus tropas y gritó: "Tridentina, Avanti!" Los soldados italianos cargaron y tomaron finalmente el pueblo para el final de la tarde.
El primer día de febrero de 1943, la columna de los "Alpini" alcanzó las líneas alemanas, después de más de 15 días de retirada. Durante esos 15 días, el térmometro alcanzó los −40 °C. Sólo un tercio de la división "Tridentina" sobrevivió. Fue la unidad con más supervivientes de la columna "Alpini".
Generale Giulio Martinat
Oficiales "Alpini" revisan sus mapas, Invierno 1942-43
"Alpini" defienden una posición
Soldados italianos en Rusia, invierno de 1942
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