Capt. Miller
II- El Duelo
Varias escaramuzas con resultados inciertos tuvieron lugar antes de esa fecha. Presuntamente, al norte de La Habana fue avistado y atacado un submarino alemán en 1942, el cual se reporto como “averiado”, por las fuerzas navales del patio, pero nunca confirmado.
El 15 de Mayo de 1943 un destacamento de las fuerzas de caza-submarinos cubanos formado por un Cs-11, Cs-13 y Cs-12 navegaba de Isabela de Sagua a La Habana escoltando al buque mercante Hondureño “SS Wanks” y al cubano “SS Camagüey”, ambos con carga de azúcar de la región cañera de Sagua La Grande . Los equipos estaban en alarma máxima, poco antes habían recibido comunicación de que un submarino alemán había sido visto al norte de Matanzas en rumbo hacia Las Villas. Los buques mercantes navegaban a 500 yardas uno de otro ( el “Camagüey” más cercano a orilla), y la escolta viajaba a unas 750 o 1.000 yardas de distancia de estos. En la vanguardia estaba el Cs-12, seguido por el Cs-11, que era el buque insignia, y el Cs-13 en la parte posterior del convoy. Aviones de la US Navy basificados provisionalmente en aerodromos cubanos cubrian el espacio aereo.
A las 17:15 horas, cuando las naves navegaban cerca del faro de Cayo Mégano (a mitad de camino entre los meridianos de Isabela de Sagua y el de Sierra Morena), un hidroavión Kingfisher de la marina norteamericana apareció en escena. El aparato realizó una picada y volando a baja altura describió dos círculos mientras coleteaba y apagaba y aceleraba el motor para señalar, de acuerdo con un código establecido, la presencia de un submarino enemigo. El mando del destacamento de las fuerzas cazadoras ordenó al capitán del Cs-13, Mario Ramírez Delgado (alférez de fragata) explorar el área señalada en por el avión,
El sonar captó señales a unas 900 yardas que producía el submarino en su huida, por lo que comenzó inmediatamente la cacería, lanzándose. A la distancia apropiada, fueron lanzadas, por la popa del buque, tres bombas de profundidad de 325 libras, graduadas para que explotaran a 100, 150 y 250 pies, de acuerdo con la velocidad de inmersión calculada al submarino.
Estas provocaron 4 grandes explosiones submarinas, la cuarta fue quizás la explosión de uno o más torpedos del submarino porque su gran potencia hizo surmergir la popa del cazador cubano inundando su sala de máquinas. El sonar parecia revelar que el submarino había sido alcanzado, pues en ese momento, los hidrófonos reportaron un sonido semejante al borboteo que hace un líquido al penetrar en un recipiente sumergido en él. Instantes después se escuchó un silbido que fue disminuyendo en intensidad lentamente. Eran indicios de que el sumergible había sido alcanzado. Para rematarlo, el cazasubmarinos arrojó otras dos bombas de profundidad, graduadas a 250 pies, y continuó la exploración.
Tras varios minutos que parecieron siglos; un puesto de observación descubrió una mancha oscura y viscosa en el agua que ascendia de las profundidades, con un fuerte olor a combustible. Ramírez tomó una muestra como prueba del hundimiento del submarino para luego incorporarse de nuevo al convoy, que habían continuado su ruta. El suceso ocurrió a la altura de los 23º 21’ de latitud Norte y los 80º 18’ de longitud Oeste, al norte de Carahatas.
Se hipotetiza que, abajo, a unos 200 metros de profundidad, el submarino averiado de muerte comenzó a realizar maniobras para evadir otra posible embestida y ante todo, salvar su tripulación. En gesto agónico puso proa hacia la plataforma marina, en busca de aguas más bajas, que le permitieran el acceso a los numerosos cayos existentes en esta parte de la Isla, pero el esfuerzo fue en vano. Inclinado hacia la popa ante los daños causados por la explosión, embistió por las inmediaciones el borde de la plataforma y se partió en dos. Supuestamente con el impulso, la parte delantera del submarino alemán salió proyectada hacia delante y la otra, se precipitó de inmediato a las profundidades.
Por su heroísmo, la tripulación cubana del navío caza-submarinos recibió un reconocimiento especial firmado por el Presidente de los Estados Unidos Franklyn Delano Roosevelt, pero razones desconocidas el gobierno cubano decidió silenciar la acción,
Al final de la segunda guerra mundial cuando los archivos alemanes de la marina fueron capturados, se supo que el U-Barco que había estado funcionando en el área en esos días había sido el U-176, capitaneado por Kapitänleutenant Reiner Dierksen.
PD: tengo imagenes del Cs-13 y de su capitan, pero no se como pegarlas!! perdoneme!!