03-01-2014
¿Y que se estaría peleando?. ¿el control de recursos naturales estratégicos? o solo es una batalla estilo Marvel vs DC?
Tanto el imperialismo propiamente "aleman" como el estadounidense, propiamente indexado como "neo-colonialismo"; al estar concientes de su identidad como nación emergente apresuradamente se reconocen como insuficientes de territorio, y de ahí que son culturas beligerantes, -jovialmente dicho esto- ofensivas.
Lo que Alemania intentó hacer en una nada jovial Europa (con edades enteras a cuestas de "tradicion" de guerras interminables), es lo que si pudo lograr EU en una norteamérica geográficamente cien años atras. De acuerdo a la historia de occidente.
La guerra de los siete años fue por sus alcances -yo la considero- una verdadera "guerra mundial", pues abarcó a las potencias del "mundo conocido" en todos los recursos de las metrópolis y las colonias puestos claramente en un plan estratégico.
El resultado no fue lo que dichas potencias pensaban que iba a suceder. -Que ganase uno u otro- Mas bien el tiro se salio de cauce, resultando en una nueva síntesis entre lo viejo y lo que se heredó hacia las nuevas tierras. Ni Francia ni Inglaterra podian haber calculado que las trece colonias se irían a convertir en algo que los habria de avasallar. El asunto de la creacion de EU es una revolución copernicana en la geopolitica.
En virtud de que los procesos humanos y sus conflictos siguen invariablemente el guión del crecimiento demográfico. (estando las luchas ideologicas y filosoficas, al fin subordinadas a esta realidad) Estados Unidos quedó tras su independencia directamente comprometido a una expansion territorial acelerada, inevitable.
Nuevamente citando, Alemania no podría repetir dicha "historia feliz". Esto es, hay mucha diferencia entre las verdes praderas de la frontera del "viejo oeste" y la conquista del las estepas del Drang nach Osten Precisamente por eso la doctrina del destino manifiesto parece civilizada en comparación con la agenda supremacista que los nazis tuvieron que instrumentar para fines paralelos, solo que -repito- un siglo después.