Miscelaneas de época

Detalle aprox. de un cañón de 36/24 libras.

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Mover un cañón de 24 o 36 libras, los mas grandes que portaba una navío de guerra del siglo XVIIIi XIX , no era tarea fácil. Los mas grandes pesaban casi 4.000 kg, incluyendo los casi 900 kg de la cureña (base de sustentación), lo que hacia dificil y sobre todo muy pesado , poder maniobrar estas moles de hierro para cargarlas o limpiarlas. No era raro que con el movimiento de alta mar se destrincaran, y provocaran un desastre si no se era capaz de detener el cañón, que, libremente, iba de una banda a otra, convirtiendose en un ariete de varias toneladas que aplastaba lo que se pusiera por delante. Para evitar esto los cañones se trincaban de forma férrea cuando no eran utilizados. Normalmente se trincaba el cañón abatíportado, esto es, con la boca del cañón encajada en la parte superior de la porta y trincado con sus propios aparejos, de tal forma que estaba perfectamente inmovilizado y no podia desplazarse. Los artilleros montaban entonces sus mesas y asientos con tablas entre el espacio que dejaban entre cada cañón para sus cosas (rancho, afeitarse etc,etc)...no debia ser fácil ser artillero de uno de esos navios   vive dios.

Detalle de como iban dispuestos. Parece que los de mayor peso y calibre iban en la parte inferior del navio ..tambien aprox.   , creo.

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El cañón de 36 libras era el arma básica de cualquier barco de guerra de la época, aunque los había de varios calibres lo mas normal es que fuesen de ese estilo. Una de sus balas pesaba alrededor de 16 kg , así que cualquiera con un poco de imaginación puede hacerse idea del daño que podia causar al impactar en otro buque. Se cargaban por la boca (avancarga) ,que hacia que se necesitase de una buena dotación de artilleros (entre 12 y 14) para hacerlo vomitar. Claro que no todos tenian ese cometido , estaban los que ayudaban a maniobrar ( halar, bracear..etc) , los que se ocupaban de retirar a los heridos, apagar incendios y relevar las bajas , por eso en tiempos de guerra las dotaciones eran mas numerosas que en tiempos de paz ..lo cual resulta obvio.

graficos y parte extraido de http://www.todoababor.es/vida_barcos/arm_nav.htm , otra pequeña parte de la REHM.

saludos

PD es que acabo de ver esta pelicula ..¡¡jo!! buena , me ha gustado. Hay algunos detalles que impresionan  

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Dicho sea, que difiere bastante de la novela original.......

Parece que los de mayor peso y calibre iban en la parte inferior del navio ..tambien aprox.   , creo.

Logico, estos cañones disparaban a la linea de flotacion e intentaban abrir vias de agua en el barco enemigo (una bala de casi 16 kg podia abrir un agujero de mas de medio metro de diametro) de ahí que se dispuseran en la linea de disparo mas cercana al agua, mientras que los de cubierta se podian cargar con metralla y disparar contra las cubiertas enemigas, aparejos, palos y velamen para que no pudiese maniobrar....

Muy bueno "apañero" y muy interesante la pagina....

Saludos

Buenos y gráficos aportes....

A mi la pelicula me pareció muy "pobre".

A mí particularmente, me encantó la película. Se ciñe bastante a las novelas originales de Patrick O´Brien (recurre solo a dos de ellas entre un total de veintiuna), en vez del batiburrillo que organizaron con el Capitán Alatriste.

El porqué iban las piezas de más calibre (y logicamente más pesadas) situadas en los puentes inferiores no era tanto disparar a la línea de flotación enemiga que bajar el centro de gravedad del buque. Mientras más peso arriba, más se balancea el barco y más inestable se vuelve.

Los cañones de mayor calibre eran usados principalmente para tiros a larga distancia con la intención de dañar la jarcia o los palos del buque enemigo. Luego, a una distancia media, eran usados como el resto: contra el costado enemigo y su arboladura. Solo cuando los buques se acercaban a distancia de abordaje, los calibres mayores solían callar y se usaban los de calibre mediano y pequeño. Y sobre todo antes del abordaje se usaba un tipo de cañón terrorífico a corta distancia contra la masa de marinería enemiga: la carronada. Este arma era corta, necesitaba un máximo de tres artilleros para manejarla y era capaz de un daño impropio para su tamaño usando un efecto perdigonada, era una especie de trabuco pero a lo grande.

Y sí, los 36 libras eran los mayores cañones a finales del XVIII y principios del XIX, pero a lo largo del primero existió un cañón de un calibre aún mayor: el 42 libras. Este calibre se dejó de usar por ser poco manejable y porque los puentes de la batería sufrían mucho con sus disparos. El 36 libras se comprobó que era mucho más útil para tiros a larga distancia que el 42.

Por cierto, ahí os dejo una imagen de la HMS Rose (la fragata que hizo de HMS Surprise en Master & Commander) en plena virada.

Bonita, ¿verdad? #29

Saludos.

Parece que la marina a vela no acaba de interesar. Lástima porque escribimos con ella páginas de oro #29 #29 #29

*El fiero turco en Lepanto,

en la Tercera el francés,

y en todo mar el inglés,

tuvieron de verme espanto.

Rey servido y patria honrada

dirán mejor quién he sido

por la cruz de mi apellido

y con la cruz de mi espada*

Saludos.

Eres un ramántico Topp. 

Hombre Ulrich, era otra forma de navegar y otra manera de hacer la guerra naval.

Al carecer los buques de propulsión, los marinos estaban supeditados al viento y a su maestría en el manejo de las velas para hacer uso de éste. La cartografía era muy imprecisa (un buen mapa valía un imperio y un buen piloto era el rey del mambo) y hasta la llegada de relojes y cronómetros de calidad , situarse por los astros era hacerlo de forma aproximada.

En cuanto a las batallas, que decir. Los buques empezaban a cañonearse desde media milla de distancia hasta el combate penol contra penol. Luego el abordaje decidía si es que alguno no había arriado su bandera antes.

Allí no habían submarinos, ni torpederos, ni radares ni nada que te permitiese hacer la guerra a distancia. Era barco contra barco y hombres contra hombres con un sable o una pica en la mano.

Saludos.

Lástima porque escribimos con ella páginas de oro

No en bronces, que caducan, mortal mano,

Oh católico Sol de los Bazanes

Que ya entre gloriosos capitanes

Eres deidad armada, Marte humano,

Esculpirá tus hechos, sino en vano,

Cuando descubrir quiera tus afanes

Y los bien reportados tafetanes

Del turco, del inglés, del lusitano.

El un mar de tus velas coronado,

De tus remos el otro encanecido,

Tablas serán de cosas tan extrañas.

De la inmortalidad el no cansado

Pincel las logre, y sean tus hazañas

Alma del tiempo, espada del olvido.

Se me pone el vello de punta.

Por cierto.

Ya está en el grupo de libros que me llevaré el mes que viene a la playa.

No solo de Jack Aubrey vive el hombre

Saludos.

Bien puedes leerlo en una playa asturiana  ¢@10

Para tí ir a la playa es hacerlo con una temperatura que ronde los 20º C, para mí o hace 38-40º C o no voy

Anoche ví un reportaje sobre Cimadevilla, el barrio donde (creo) nació Jovellanos. Algo precioso.

Saludos.

Lo mejor de Cimadevilla es este señor, me encantan sus canciones y sobre todo esta ( lo siento Wittmann )

http://vuestraradio.foroactivo.com/entrevistas-f38/victor-la-voz-de-una-cancion-gijon-del-alma-en-radio-enol-t3156.htm

Ya le diste la tarde al carbayón

Saludos.