20-04-2006
La idea de atacar la base naval de Scapa Flow no era nueva, ya durante la Primera Guerra Mundial se había hecho un intento fallido con un submarino que resultó hundido al colisionar con una mina. Así que los británicos ya prevenidos tenían la base fuertemente protegida.
El plan de ataque fue ideado por el almirante Dönitz. Al igual que en la ocasión anterior, se pretendía penetrar en el fondeadero de Scapa Flow con un submarino y hundir allí algún buque de la Home Fleet británica. La empresa era extremadamente difícil, los pasos de entrada al fondeadero estaban muy vigilados, y cerrados por redes o barcos hundidos (block ships), además de las peligrosas corrientes.
Después de establecer los planes de la operación, Dönitz eligió para ejecutarla al teniente de navío Günter Prien que estaba al mando del U-47, y que aceptó voluntariamente la misión. Prien y su tripulación partieron del puerto de Kiel hacia Scapa Flow el 8 de octubre de 1.939. El 13 de octubre, el U-47 pasó el día descansando sobre el fondo a 90 metros, frente a las Islas Orcadas.
A las 19:15 salió a superficie y se dirigió hacia el Holme Sound. A las 22:00 se sumergió para evitar ser descubierto por un mercante, y emergió de nuevo a las 22:37. El tiempo era perfecto y la mar estaba en calma. Prien estuvo a punto de meterse por el Skerry Sound pero rectificó y se dirigió al Kirk Sound que era por donde Dönitz había planeado que podía entrarse en el fondeadero.
Después franqueó el Kirk Sound por el norte de los block ships donde a punto estuvo de quedarse enganchado con las cadenas de amarre de uno de los buques, no obstante consiguió penetrar en la rada. A las 00:27 Prien escribía: "Ya estamos en Scapa Flow". Una vez dentro Prien divisó al norte un acorazado y justo detrás otro buque.
Entonces, a las 00:58, lanzó dos torpedos, y acto seguido lanzó otro más contra el buque más cercano. Un cuarto torpedo no salió del tubo debido a un fallo mecánico. Pasados unos minutos se oyó una única explosión que asombrosamente no pareció llamar la atención de los británicos que probablemente pensaron en un primer momento que se trataba de un accidente. Los otros dos torpedos ni siquiera hicieron explosión. El U-47 dio la vuelta y lanzó otro torpedo por el tubo de popa que tampoco hizo explosión.
Entonces Prien ordenó cargar de nuevo lo tubos para atacar otra vez, y a las 01:22 lanzó tres torpedos más contra el acorazado. Esta vez sí, la explosión fue fortísima y el acorazado Royal Oak, de 29.000 toneladas, se hundió en unos minutos llevándose consigo la vida de 833 hombres. En ese momento se despertó toda la rada que estaba totalmente iluminada, y Prien se retiró por el Kirk Sound pero esta vez pasó al sur de los block ships.A las 02:15 el U-47 ya estaba fuera de la rada, y el día 17 llegó a Kiel.
Prien y su tripulación fueron recibidos con todos los honores; el acorazado Scharnhorst dio la bienvenida al U-47 con toda su dotación formada en cubierta. Además Prien fue condecorado con la Cruz de Caballero e invitado a almorzar junto con toda su tripulación por el propio Hitler. Por su parte Dönitz fue ascendido a contralmirante.
Por supuesto el mando alemán guardo el máximo secreto sobre el fallo de los torpedos, aunque no sería esta la última vez que fallasen. Respecto del buque que estaba detrás del Royal Oak, los alemanes afirman que era el acorazado Repulse, pero según parece ese buque no estaba en Scapa Flow esa noche y en realidad se trataba del viejo transporte de aviación Pegasus.
Debido a este éxito Reader obtuvo la autorización de Hitler para atacar a los trasatlánticos enemigos que navegaban en convoy, y para apoderarse de todos los mercantes neutrales que transportasen contrabando así como la autorización de atacar a todos los mercantes enemigos sin previo aviso.