10-06-2007
Nacido del matrimonio compuesto por el Conde Alfred Graf Schenk von Stauffenberg y Caroline née von Üxküll-Gyllenbrand, como el tercer hijo de un total de tres hermanos, Berthold y Alexander, una rancia aristocracia católica sueba, que poseía un castillo en Lautlingen / Württemberg. Entre sus ancestros se contaba nada menos que August Wilhelm Antonius Graf August Neidhardt von Gneisenau, prócer prusiano del ejército imperial aleman, cuyo apellido ostentaba un crucero pesado. Stauffenberg era un varon muy apuesto, de alta estatura y con un innegable don de gentes, lo que lo hacía muy popular entre sus pares. Albert Speer, quien trató con Stauffenberg como enlace de la oficina del Cuartel General de la Reserva, le consideraba extremadamente amable y una figura mística por su apariencia.
Educado en las mejores escuelas de la época, con mucha inclinación por la literatura, el joven aristócrata se une al ejército (Reichswehr) en 1926. Si bien no se opuso en un principio al ascenso al poder de los nazis, su oposición nació después de la llamada Noche de los cristales rotos al ver como los SS realizaban todo tipo de presiones y vejaciones a judíos. En noviembre de 1933 contrajo matrimonio con Nina Baroness (Freiin) von Lerchenfeld en Bamberg.
Ya asimilado a la Wehrmacht, en 1937 alcanza el grado de Capitán, un grado que normalmente lo hubiera conseguido a los 6 años de carrera. Para esa época, miembros de su familia habían establecido un movimiento de resistencia entre militares prusianos contra el régimen nazi, encabezado por Graf Nikolaus von Üxküll, tío de Klaus. Su regimiento es asimilado a la 6ª División Panzer y toma parte en la ocupación de los Sudetes y en la guerras contra Polonia en 1939 y Francia en 1940. El 31 de mayo de 1940 es condecorado con la Cruz de Hierro de Primera Clase. En 1941 participa en la guerra contra la Unión Soviética y queda horrorizado por los excesos contra la etnia judía y la derrota de Stalingrado. En enero de 1943 es ascendido a Teniente Coronel y transferido a la campaña del Norte de África, siendo oficial de observación de artillería de Rommel adscrito a la 10ª División Panzer. Durante una incursión de observación durante el transcurso de la Batalla del paso de Kasserine, su vehículo es sorprendido y atacado por un bombardero británico y es gravemente herido al recibir metralla, perdiendo su ojo izquierdo, su mano derecha completa y dos dedos de su mano izquierda.
Se recupera de sus heridas y es transferido a Berlín al mando del General Friedrich Olbricht en el OKW (Oberkommando der Wehrmacht) en Bendlerstrasse, quien era miembro del comité de resistencia que planeaba un plan para dar muerte a Hitler. Posteriormente fue asignado en la jefatura del estado mayor del general Freidrich Fromm, a cargo de la reserva de la Wehrmacht.
Claus von Stauffenberg, bajo el nuevo cargo de jefe de las reservas de la Wehrmacht (Ersatzheer), tenía acceso directo a las reuniones del comité de planificación de las operaciones que el mismo Hitler encabezaba. Esta instancia le permitía acceder a las cercanías del Führer. A comienzos de 1944 fue promovido a Coronel (aleman: Oberst).
El plan se denominó Plan Walkiria y tenía entrelazados a más de 200 a 500 implicados en diferentes estratos de la sociedad alemana, militares de la Wehrmacht e incluso de la sección de inteligencia y espionaje Abwehr liderada por Wilhem Canaris.
El plan Walkiria había sido ideado inicialmente por Heydrich para Hitler para contener el control del Reich, en caso de que la seguridad y estabilidad del régimen se viera comprometida; paradójicamente este mismo plan le iba a eliminar.
La nobleza preeminentemente prusiana con algunos miembros muy religiosos se había constituido en un círculo cerrado llamado Círculo Kreisau Kreisauer Kreis y consideraba que Hitler estaba llevando a la ruina moral y material a Alemania, por lo que debía ser eliminado, este círculo era la parte civil de la conspiración y estaba liderada por el conde von Moltke que llevaba el mismo nombre que el prócer Helmuth von Moltke, Peter Yorck von Wartenburg, Adam von Trott zu Solz, Hans Bernd von Haeften, Fabian von Schlabrendorff, el alcalde de Leipzig, Carl Goerdeler, representantes de la familia Stauffenberg tal como Berthold Graf Schenk von Stauffenberg entre otros.
La parte militar estaba encabezada por el general Henning von Treskow, el mariscal retirado Erwin von Witzleben, el general Ludwig Beck, el general Olbricht y Friedrich Fromm quien realmente no había dado por escrito su apoyo incondicional al movimiento, pero había participado en la confección del listado del nuevo gobierno, su actitud había sido ambivalente.
El plan consistía en eliminar a Hitler, Göring y Himmler y luego en Berlín, Fromm debería neutralizar a las SS con el ejército de reserva. En Francia, Stülpnager debería neutralizar a los Gauleiters y SD, cortar las comunicaciones en Berlín. El comandante Carl Szokoll, el coronel Heinrich Cordé y deberían neutralizar los edificios de la Gestapo, la policía en Viena. Posteriormente se instalaría un gobierno provisional que intentaría hacer las paces con el occidente y el oriente y detener la guerra. En total participaban unos 200 implicados directos y unos 300 indirectamente.
Después de varios intentos de atentados frustrados entre ellos el del Capitan Baron Axel Freiherr von dem Bussche-Streithorst el mismo Stauffenberg se ofrece de ejecutor del atentado que se estaba conjurando, sin embargo, por sus lesiones se duda de su capacidad física para activar la bomba, pero es esa misma condición lo que lo enmascara y le encargan llevar a cabo el intento.
Stauffenberg sigue a Hitler y hace su primer intento el 26 de diciembre de 1943, pero un brusco cambio de agenda lo pospone, nuevamente lo intenta el 14 de julio, pero la reunión se cancela.
Por fin, aprovechando que el 20 de julio del mismo año se iba a dar una reunión de alto mando en el cuartel general de Hitler, llamado "Wolfsschanze" y situado cerca de Rastenburg (hoy, Ketrzyn-Polonia), él y su ayudante, el teniente Wherner von Haeften, llegan al cuartel general el 20 de julio de 1944.
Stauffenberg porta dos maletines, en cada uno de ellos hay un poderoso explosivo que se activa mediante un detonador químico absolutamente silencioso. Para sorpresa de los conjurados, Hitler adelanta la hora de la reunión ya que debería recibir a Benito Mussolini, pasado el mediodía. Este percance casi hace fracasar el plan, pues Stauffenberg apenas tiene tiempo para activar una bomba al menos. Antes de entrar, Stauffenberg se introduce en un sanitario y con mucha dificultad extrae el mecanismo con sus tres dedos de la mano izquierda, activa con un alicate el primer maletín pero el segundo no lo alcanza a activar por la falta de tiempo. El dispositivo químico hara detonar la bomba en menos de 5 minutos.
El lugar del atentado era inicialmente el búnker cerrado de Hitler, pero miembros de la Organización Todt estaban trabajando allí y se decide realizarlo en el galpón de Albert Speer, una casa de madera, que constaba con varios ventanales y un mesón amplio.
A la reunión asisten 16 personas, además de Hitler. El ambiente es caluroso por lo que se ordena el abrir las ventanas. Empieza la reunión.
Stauffenberg llega con cierto retraso, la reunión ya se había iniciado, se excusa con un gesto y se sitúa tan cerca de Hitler como le es posible, supuestamente esperando su turno de exponer una situación en el Frente Oriental. Hitler ocupa la parte central de la mesa mirando hacía el exterior, Stauffenberg se sitúa a la derecha de este, a apenas un metro y medio de Hitler.
En un momento determinado de la apertura de la reunión, se retira discretamente pretextando una llamada desde Berlín y coloca el maletín con explosivos bajo de la mesa, muy cerca del lugar en el que se apoya Hitler. Tiene apenas 3 minutos antes de explotar.
Al salir Stauffenberg, uno de los asistentes se topó con su pie accidentalmente con el maletín y lo apartó, colocándolo junto a una de las patas gruesas de la mesa. La reunión continuó.
Tres minutos después, el artefacto explotó, Hitler que estaba agachado sobre la gruesa mesa ve de súbito que esta sube y le golpea el rostro, la explosión es violenta y mata al estenógrafo amputándole las piernas e hiere de muerte a cuatro asistentes más , dejando a otros varios asistentes mal heridos. Como la habitación estaba con las ventanas abiertas, la fuerza de la explosión se amortiguó.
Stauffenberg y Haeften presenciaron a lo lejos la brutal explosión y creyeron, sin comprobar los resultados, que Hitler ni nadie podía haber sobrevivido a ella. Partieron apresuradamente al aeródromo, Stauffenberg se deshace de la segunda bomba arrojándola por la ventanilla del coche. No son retenidos en los puestos de guardia y se hacen transportar con un Heinkel He 111 a Berlín, radiando previamente la palabra "Walkiria", como señal de que el atentado había tenido éxito y que otros implicados tomasen las decisiones acordadas para asumir el control del estado.
Hitler salvó la vida increíblemente al recibir la explosión indirectamente al ser protegido por la gruesa pata y el grosor de la mesa, la cual se deshizo en astillas que quedaron clavadas en su pierna, sufriendo solo magulladuras ligeras en su brazo y en el lado izquierdo de su rostro. Mueren cuatro personas. el coronel Schmundt, el estenográfo, el coronel Heinz Brandt y un general de la Luftwaffe.
Se pensó en un primer minuto que el lugar había sido bombardeado, pero no habían reportes de naves enemigas en el área, con el pasar de los minutos, la idea de un atentado se hace visible, la ausencia de Stauffenberg levanta sospechas. En la orilla de un camino se encuentra un maletín conteniendo la segunda bomba, es reconocido como similar al que llevaba Stauffenberg.
Stauffenberg, en pleno vuelo a Berlín, daba por hecho la muerte de Hitler sin sospechar lo realmente ocurrido. Al llegar a la capital, se da cuenta que el plan de toma de poder no se ha iniciado. El ejército de reserva no ha tomado los cuarteles.
Mientras tanto, Martin Bormann es el primero en demostrar evidencias exactas de lo ocurrido e informa a Hitler que el secretario de guardia había visto salir a Stauffenberg previamente a la explosión y se había alejado apresuradamente del lugar.
De este modo Stauffenberg se convirtió en el sospechoso nº 1 de Himmler y Ernst Kaltenbrunner.
Mientras eso ocurría los implicados se movilizaron para efectuar el Putsch, pero el General Friedrich Fromm comandante en jefe del Comando de Reemplazo, quien sabía del plan y tenía por misión desmovilizar al ejército escuchó por radio una alocución de Hitler condenando el atentado y que éste se había salvado. Joseph Goebbels se comunica con el coronel Remer y lo hace escuchar a Hitler por teléfono, quien le ordena desmovilizar a los reservistas. Heinz Guderian acude con sus tanques y toma Berlín. El Golpe de Estado se desbarata.
Friedrich Fromm fríamente se desentiende de su implicación y asumiendo con increible cínismo el papel de leal seguidor del Führer hace detener a los sorprendidos conspiradores, el coronel Claus Von Stauffenberg, el coronel Heinrich von Haeften, el general Oltbricht y a Albrecht Mertz von Quirnheim, cabecillas de la operación en el castillo de Berlín.
Fromm avisa al ministro de propaganda Joseph Goebbels que está sumariando a los cabecillas y apenas cuelga el fono, estos son sacados al patio de estacionamientos y ejecutados en el patio esa misma noche, antes que llegaran las SS, sumariamente sin corte ante un escuadrón de fusileros leales al régimen. Esta decisión la tomó a fin de que los conspiradores no declararan que él sabía del plan con antelación, dando pie a una posible ejecución.
Las últimas palabras al grito de Stauffenberg segundos antes de morir son: Larga vida para la Sagrada Alemania.
Himmler arriba algunas horas más tarde y al dar cuenta Fromm de lo acontecido, le responde exponiéndole lo (sospechosamente) apurado que estaba por ejecutarlos. Esto lo implicaría.
Stauffenberg fue enterrado honorablemente con todas sus medallas, pero Hitler, sediento de venganza, descubre más tarde la implicación de Fromm y le haría ejecutar en abril de 1945 y hace desenterrar el cadáver de Stauffenberg haciéndolo incinerar sin sus medallas. Se hace registrar Bendlerstrasse y en una caja de seguridad de Fromm se encuentra una lista de los complotados con los roles que asumirían en le gobierno provisional. La cacería empieza esa misma noche. El destino de estos iba a ser terrible.
Los otros implicados, Berthold Graf Schenk von Stauffenberg, figura central del complot fue sentenciado por una corte especial llamada "Corte del Pueblo" a cargo del juez Freisler y ejecutado en la Prisión de Plötzensee por estrangulamiento con cuerdas de piano, junto a ocho implicados más, además de la detención de Günther von Kluge, Albrecht Haushofer, Canaris y otros militares de relevancia. Los ahorcamientos son filmados y fotografiados para ser presentados a Hitler.
Erwin Rommel, quien sabía del complot pero no participó, fue inducido al suicidio. En las dos semanas siguientes murieron unas 200 personas directamente implicadas. Al final, más de 5.648 personas fueron ejecutadas los meses siguientes por las SS. De todos los intentos de Atentados contra Hitler, este es el que estuvo más cerca de lograr su objetivo.
La familia de Claus von Stauffenberg, su esposa y sus hijos fueron arrestados por las SS y ordenada su ejecución sumaria, sin embargo, estando al final del sitio de Berlín, los SS no ejecutaron la orden y los entregan junto a sí mismos, a un comando británico. Stauffenberg estaba casado desde 1933 con Nina Baroness (Freiin) von Lerchenfeld y tenían cinco hijos: Berthold, Heimeran, Franz-Ludwig, Valerie y Konstanze. El mayor de ellos, Berthold, llegó a general en el Bundeswehr aleman.
Inicialmente la acción de Claus von Stauffenberg fue considerada un acto de traición para la población alemana, pero con el correr del tiempo y colocados en su contexto a los participantes de la historia, se le ha dado categoría de héroe en la lucha por la liberación de yugo nazi a Stauffenberg, llevando inclusive una calle de Berlín la antes Bendlerstrasse, su apellido en la actualidad, la Stauffenbergstrasse .