17-03-2006
No voy a entrar aqui en debate sobre si realmente ha sido el mejor piloto de todos los tiempos, o si solo fue uno mas de esos pilotos que abultaron su numero de derribos a costa de las latas voladoras rusas,. Sin embargo Erich Hartmann, ademas de ser mi aviador preferido ostenta el record de derribos con el impresionante numero de 352 aviones de rribados. Y a diferencia de otros pilotos, un detalle que le hace Hartmann estar en lo mas alto, es que su cuenta de derribos empezo en una epoca en la que precisamente los nuevos modelos de aviones rusos empezaban a aparecer y el ejercito aleman no tomaba ya la iniciatiba.
Aun asi un hombre como Erich Hartmann se merece una "pequeña" biografia. (Siento no poder poner la fuente pues son retazos de textos que tengo de internet y no recuerdo de donde lo saque)
Erich Hartmann nacio en Stuttgart en 1922 y pasó parte de su infancia en China, donde su padre médico ejerció su profesión en los años 20. Su madre, Elisabeth Machtoff, fue pionera de la aviación en Alemania y la responsable del temprano contacto de su hijo con los aviones. Frau Hartmann era originariamente aviadora deportiva, pero, después de la llegada de Hitler, los clubes de planeadores fueron alentados. Ella ayudó a establecer un club e planeadores en Weil, Schoenbuch, cerca de Stuttgart, en 1936.(de casta le viene al galgo).
El joven Erich aprendió a volar en planeadores en su adolescencia y en 1938 ya estaba plenamente calificado como instructor de planeadores. Hoy, él dice que sus tempranos contactos con el vuelo contribuyeron a desarrollar en él un sexto sentido para el mal funcionamiento de los aviones:
-Si algo anda mal en un avión que estoy piloteando, yo lo sé antes de que me lo digan los instrumentos o de percibir otra señal física directa e irregularidades.
Esta situación lo salvo muchas veces durante la guerra y le fue ventajosa cuando se desempeñó como experto de evaluación táctica de la Fuerza Aérea Alemana.
Cuando era un escolar de quince años, en 1937, el rubio Erich puso los ojos en una muchacha de trece, morena, llamada Ursula Paetsch. El futuro as no era tan agresivo entonces como lo sería después. Hasta dos años más tarde, en septiembre de 1939, no estuvo listo para atacar.
Ursula y una amiga caminaban por una calle hacia la escuela en Korital-Stuttgart cuando Erich se les acercó en su bicicleta. El muchacho se apeó de un salto y se puso junto a las dos muchachas. miro directamente a los ojos de Ursula y dijo tímidamente:
- ¡Erich Hartmann!
Este incidente inició una historia de amor que, si fuera presentada como ficción, sería rechazada por las editoriales y los estudios cinematográficos como producto de una imaginación anticuada.
"Usch", como la llama Hartmann, se convirtió en su novia. Pero no se casaron hasta el 10 de noviembre de 1944, después que Erich hubo derribado su avión enemigo número 301. Los ases Gerd Barkhorn y Willi Batz fueron testigos de la ceremonia. Durante sus períodos de separación, él pintaba un corazón sangrante en el fuselaje de su Me 109 como símbolo de su dolor, pero vendría una separación todavía peor.
En abril de 1945, después del colapso del Reich, Hartmann se dirigió con su Gruppe al oeste hacia una unidad avanzada de tanques del ejército 3 del general Patton, fue hecho prisionero de guerra, pero por el acuerdo entre Roosevelt y Stalin, poco después fue transferido por los norteamericanos en acto de total desconsideración a la custodia de los rusos. Estuvo encarcelado en prisiones rusas diez años y medio, despojado hasta los derechos más elementales después de haber sido condenado en un juicio plagado de irregularidades. De echo fue acusado de haber saboteado la industria del madre rusia al haber destruido 352 aviones (concretamente 345 aviones rusos, porque 7 fueron mustang americanos derribados sobre Rumania)
Recibía de Alemania un correo esporádico de ocasionales tarjetas postales y a veces una carta. Estas cartas eran usadas frecuentemente en sutiles esfuerzos soviéticos para quebrantar su voluntad. En 1948, cuando estaba prisionero, su hijo Peter Erich, de tres años, murió en Alemania. Hartmann no se enteró de esa pérdida hasta 1950. Cuando finalmente fue liberado en 1955, casi un tercio de su vida se le había ido en ese confinamiento ilegal. Su hijo y su padre habían muerto. Pero su amada Usch lo esperaba.
La fe que ella tenía en que él sobreviviría y regresaría nunca la abandonó. Hoy él dice que lo sostuvo su confianza en ella. Pese al gran vacío producido en sus vidas, Erich y Usch empezaron de nuevo. Su segundo retoño es hoy una hermosa muchacha de 18 años llamada Ursula, como su madre, pero apodada "pequeña Usch".
La ambición de su vida era ser médico, como su padre, pero los largos años en prisión lo dejaron demasiado gastado para comenzar un estudio tan exigente.
El amor entre Erich y Usch es el fondo de su excitante carrera de combatiente y de la épica historia de su década en cárceles rusas. Hartmann vivió sus últimos días como coronel retirado de la fuerza aerea alemana asta que la muerte se lo llevo un 20 de septiembre de 1993. Rusia exoneró a Erich Hartmann en enero de 1997, indicando que su convicción de crimenes no había sido legal. Algo es algo… pero sus años de carcel nadie se los pudo quitar…
La segunda guerra mundial para Hartmann.
Hartmann fue el afortunado destinatario de un entrenamiento completo de piloto de caza de la Luftwaffe, que empezó el 15 de octubre de 1940, cuando se unió al regimiento 10 de entrenamiento militar de la Luftwaffe, en Nuekuhrn, cerca de Könisberg, Prusia Oriental. Los vuelos de entrenamiento no empezaron hasta marzo de 1941 en la Academia Escuela del Aire de Berlín Gatow. Fue entonces que sus instructores decidieron que él estaba mejor dotado para convertirse en piloto de caza.
Graduado casi un año más tarde, corrió a Stuttgart para asegurarse que nadie se había enamorado de su novia. Tranquilizado al comprobar que ella seguía siendo fiel, pidió a Usch que lo esperara. Quizás las cosas se arreglarían pronto y las condiciones serían más favorables para el matrimonio. La joven de pelo oscuro aceptó.
Fue enviado a al Escuela de Caza Nº 2, en Zerbst, ahora en la zona oriental de Alemania. Cuando cumplió 20 años empezó a volar en Me 109. En agosto de 1942 fue destinado a la JG 52, en Rusia. Esta ala operaba al oeste de Mostock, en la parte norte del Cáucaso, al mando del temible Kommodore Dietirch Hrabak.
Su primera mision de combate no fue lo que se dice precisamente un éxito, y como el mismo admitio “-Yo había cometido todos los pecados capitales de un piloto de caza bisoño-“
Ha Hartmann le mantuvieron en tierra tres días y durante ese tiempo debío trabajar con la gente de mantenimiento. El que se iba a convertir en el mayor as de la historia no empezaba con muy buen pie.
Ese período de trabajo de mantenimiento probablemente enriqueció sus conocimientos sobre apoyo mecánico. Años más tarde, como Kommodore de la JG 711 en Ahlorn, en 1959 62, Hartmann presidió el desarrollo y perfeccionamiento de un sobresaliente sistema de mantenimiento. Sin embargo, el "Caballero Rubio" reconoce la asistencia de "mi viejo amigo el coronel Toliver, del ala 20 de bombarderos, en Wethersfield" en la organización del afamado servicio de mantenimiento de la JG 71.
Cuando Hartmann volvió a volar, estaba decidido a no repetir sus errores. Y vaya si no volveria ha repetirlos. Durante dos semanas y media continuó volando como compañero de ala, esperando su oportunidad y perfeccionando sus aptitudes para el combate aéreo. Su momento llegó el 5 de noviembre de 1942. A mediodía, el Schwarm de cuatro cazas en el que volaba como compañero de ala se trabó en combate con diez caza lagg-3 y dieciocho cazas bombarderos IL-2. Este fue precisamente el modelo de avion que cayo como primera victima de Hartmann, sin embargo este tuvo que aterrizar de panza con su avion. Cuando el caballero rubio salio de la cabina, vio estrellarse a su victima.
Dos minutos más tarde Hartmann fue recogido por un vehículo del ejército y llevado nuevamente a su base. En este encuentro se desempeñó mucho mejor como piloto pero, sin embargo, perdió su propio avión al derribar al IL-2 dos días más tarde lo acometió una fiebre alta y debió pasar dos semanas en el hospital.
No volvió a lograr otra victoria hasta el 27 de enero de 1943, cuando derribó un caza MIG y regresó a salvo a su base. Para fines de abril de 1943 tenía once victorias y había logrado su primera victoria múltiple: Dos Lgg-3 el 30 de abril de 1943. Había superado su fiebre inicial cometía cada vez menos errores y desarrollaba silenciosamente sus propias técnicas de combate.
El 7 de julio de 1943 obtuvo siete victorias en un día: cuatro LA-5 y tres IL-2. Los días en que lograba una sola victoria se hacían cada vez más raros. Continuamente cumplía cuatro misiones al día, y a veces más. La acción contra el enemigo producíase pocos minutos después de despegar y había numerosos combates de quince minutos para interceptar a los aviones soviéticos que se acercaba a la línea del frente.
Durante los primeros meses de su experiencia de combate Hartmann voló en compañía de algunos ases sobresalientes, todos los cuales lo superaban en cantidad de victorias. El Gruppe III de la JG 52 a comienzos de 1943, se hallaba bajo el mando del mayor Hubertus von Bonin, veterano de la guerra civil española. Von Bonin obtuvo cuatro victorias en aquel conflicto y cuando murió en acción, en diciembre de 1943, tenía setenta y siete victorias confirmadas en ambas guerras.