El Hurricane.
Nacido de un diseño con características que no pueden ser consideradas innovadoras o brillantes, sus líneas asemejaban más a los biplanos precedentes que a los monoplanos que le seguirían. Fue sin embargo el primer caza monoplano que dotó a la RAF, el primero en contar con tren retráctil y el primer caza británico en alcanzar los 500 Km/h.
Aún así el Hurricane demostró con el correr del tiempo ser un aeroplano fuerte y resistente, capaz de soportar intenso castigo y seguir volando, fácil de volar, bien dotado de armamento y por sobre todo disponible en cantidades suficientes cuando más se lo necesitó, es decir, en los infernales meses del verano de 1940, cuando el drama de la Batalla de Inglaterra tuvo lugar.
Nacimiento
Sydney Camm, diseñador de la Hawker Aircraft Ltd, ya se había ganado su reputación como padre de dos exitosos diseños de biplanos, el bombardero liviano Hart y el elegante caza Fury, ambos de dotación de la RAF, que habían sido exitosamente exportados a varios países y, en el caso del Fury, tuvo un relativo buen desempeño volando para el bando republicano en la Guerra Civil Española. Fue en 1933 cuando comenzó a estudiar su primer monoplano de caza, el Fury Monoplane.
Camm se dedicó entonces a rediseñar el Fury, dejando prácticamente sin modificar el fuselaje y los empenajes, instalándole un motor Rolls-Royce "Goshawk" refrigerado a líquido con radiadores de superficie y adoptando un ala baja en voladizo con un tren de aterrizaje carenado y fijo. Este diseño inicial del Fury Monoplane sufrió una radical transformación en 1934, cuando Camm recibió de la Rolls Royce los primeros datos del nuevo motor P.V.12 de doce cilindros (predecesor del mítico Merlín) que, pese a ser un poco más pesado y voluminoso que el Goshawk, ofrecía potencias bastante mayores, más que nada en altura. A consecuencia de esto el centro de gravedad del avión se vio seriamente desplazado, obligando a Camm a correr hacia atrás el radiador ventral ganando en cambio la posibilidad de instalar un tren de aterrizaje retráctil con una trocha considerable y de gran resistencia.
El nuevo diseño pasó a llamarse Interceptor Monoplane, y ahora cumplía las especificaciones F.36/34 del Ministerio del Aire. A comienzos de septiembre de 1934 presentó su proyecto a las autoridades mediante un modelo que suscitó algunas correcciones, que se efectuaron hacia fines de julio de 1935. Entre otros estaba el armamento, que en un principio se había previsto dos ametralladoras Vickers K instaladas en el fuselaje y dos Browning en los planos, debía cambiarse por ocho ametralladoras alares.
Gracias a su sencilla estructura y a la gran dedicación puesta por la Hawker en el nuevo avión, el prototipo fue completado en el otoño de 1935. El 23 de octubre el aparato con el número de serie K5083, fue llevado desde la planta de Kingston al campo Brooklands, donde el 6 de noviembre efectuó el primer vuelo, con el jefe de pilotos de pruebas de la compañía, George Bullman a los mandos.
Diseño
El Hurricane era un monoplano de ala baja en voladizo, con tren de aterrizaje convencional retráctil, empenajes cruciformes y propulsado por el motor Rolls-Royce "Merlín" refrigerado a líquido, cuyo radiador estaba colocado en el vientre del fuselaje a la altura de la cabina.
El ala baja estaba conformada por una sección central de notable espesor (19%) con planta rectangular, adherida al fuselaje y por dos semialas externas de planta trapezoidal, con un ligero diedro y una marcada convergencia en el espesor.
Todo el borde de fuga, excepto las junturas de los extremos, estaba completamente ocupado por los alerones (revestidos en tela) y los hipersustentadores del intradós, en cuatro elementos. La estructura del ala estaba apoyada sobre dos resistentes largueros unidos por un sistema de costillas diagonales con platabandas de acero de elevada resistencia en la sección central y la tradicional sección en "8" obtenida por un remachado de elementos en chapa, para las semialas externas.
En las primeras series sólo el borde de ataque fue en chapa de aleación liviana, mientras que el resto de la superficie del ala estaba revestido en tela. Posteriormente, previendo las mayores exigencias ocasionadas por el empleo de un armamento más pesado y considerando el peligro de que, durante evoluciones violentas, se pudiesen comprobar amplias roturas de un revestimiento de tela dañado por impactos enemigos, se llegó a una nueva estructura alar completamente metálica, en la que desaparece el costillado diagonal que unía el larguero anterior con el posterior y que, a partir de marzo de 1940, sustituyó completamente a la anterior en las líneas de montaje.
En la sección central del ala, en la parte externa del fuselaje, estaban instalados los dos depósitos principales de combustible de tipo auto obturante; un tercer depósito auxiliar estaba ubicado en el fuselaje, entre el mamparo parallamas y el tablero. Los tanques alimentaban por separado teniendo el piloto una llave selectora en la cabina para distribuir el consumo.
El fuselaje del Hurricane siempre estuvo constituido por una estructura reticulada de tubos de acero y de aleación liviana, reforzado por un armazón diagonal de tirantes de acero y con revestimiento en chapa de aleación liviana para la sección delantera (hasta la altura del apoyacabeza). En la parte posterior de esta sección, a la estructura reticulada resistente estaban aplicados arcos de diafragma de madera, que soportaban los larguerillos longitudinales de abeto, a los cuales estaba aplicado el revestimiento de tela.
La sección frontal del fuselaje no había sido modificada respecto de la estudiada en el proyecto F.36/34 original, en el cual estaba prevista la instalación de dos ametralladoras en los laterales de la cabina. El puesto de pilotaje era espacioso y ofrecía buena visibilidad en vuelo; éste estaba provisto de parabrisas con vidrio frontal a prueba de proyectiles y sobre cuyo gran arco estaba aplicado un espejo retrovisor, de una cúpula corrediza hacia atrás y de blindaje anterior y posterior para la protección del piloto. En correspondencia con el mamparo parallamas, a los cuatro largueros principales del reticulado del fuselaje, estaba unida la bancada en ejes tubulares, que sostenía el motor.
Los empenajes estaban constituidos por un estabilizador de doble larguero, revestido de tela con excepción del borde de ataque y las puntas; por una deriva, adherida al fuselaje cuya estructura de tres largueros tenía un revestimiento similar al del estabilizador; por un elevador de un solo larguero revestido en tela, con amplias picos de equilibrio en los extremos y aletas de compensación en los bordes de fuga, regulables en vuelo y en tierra y por un timón, también de un solo larguero y revestido en tela, con aletas compensadoras también regulables en vuelo y un pequeño pico de equilibrio, en el cual estaba alojada la masa de contrapeso.
El tren de aterrizaje, cuyos parantes anteriores tenían una trocha entre ejes de 2,31 metros, era notablemente resistente. Los parantes anteriores (provistos de ruedas de 80 cm de diámetro), que en posición de extraídos se proyectaban hacia delante del ala, se retraían retrocediendo rápidamente al mismo tiempo por efecto de los puntales de contraviento posteriores, de modo que se alojaban detrás del larguero anterior. La rueda de cola no era rebatible y estaba provista de un amortiguador oleoneumático.
El motor del Hurricane fue siempre el doce cilindros en línea Rolls-Royce "Merlín" en distintas versiones y con diferentes potencias, que accionaba una hélice bipala de paso fijo en madera Watts (al comienzo), de 3,43 metros de diámetro y luego una hélice tripala De Havilland con dos pasos o, más frecuentemente, una hélice tripala o cuadripala Rotol de velocidad constante, con diámetros que iban de los 3,28 m a los 3,43 m. La refrigeración del motor y del lubricante estaba provista por el radiador ventral, que tenía un sistema de abertura variable mediante una persiana regulable.
El armamento del Hurricane, en su primera versión, estuvo constituido por ocho ametralladoras Browning de 7,7 mm, instaladas en el ala con su campo de tiro fuera del disco de la hélice y con una carga total de 2700 proyectiles. La resistencia del avión y su notable capacidad de carga permitieron, en las series siguientes, un aumento del armamento que pasó a ser de doce Browning de 7,7 mm con 3984 proyectiles.
Brownings de ,303 (7,7mm)
A fines de 1941 y, siendo ya evidente que la ametralladora liviana tenía una eficacia muy limitada, se pasó a dotarlo de cuatro cañones de 20 mm Oerlikon-Hispano y, posteriormente, cuando la aparición de nuevos cazas de performances superiores relegó al Hurricane a la función de avión de ataque, se cambió por dos cañones Vickers S de 40 mm en góndolas subalares conservando dos de 7,7 mm para colimar el blanco. Las misiones de ataque a tierra obligaron a la instalación de portabombas y racks para cohetes en el ala del Hurricane, totalizando cargas útiles de hasta 454 kg.
Versiones de largo alcance empleados en teatros de operaciones alejados fueron dotados de depósitos subalares lanzables de 200 litros.
