Transcribo a continuación un resumen del Colorario o consecuencias de la guerra del siguiente libro, me pareció especialmente interesante :)
[table][tr][td][img width=230]http://www.sigloxxieditores.com/cont/catalogo/imagePot/9788432313714_04_n.jpg[/img][/td]
[td]Autor: Adam Zamoyski.
Traductor: Herminia Bevia y Antonio Resines.
Editorial: Siglo XXI de España Editores, S.A.
Páginas: 160 pags.
Encuadernación: Tapa dura.
Formato: 13,5 x 21 cm.
ISBN: 978-84-323-1371-4.
Año de edición: Enero 2009.
Precio: 16,00 €.
Sinopsis: En el verano de 1920, a las puertas de Varsovia, tuvo lugar una batalla que, por su importancia para la historia, figura junto a las de Maratón y Waterloo. A pesar de su trascendencia y dramáticas consecuencias, se ha olvidado en gran medida que Lenin estuvo a un paso de hacer pedazos el Acuerdo de Paz de Versalles y extender el bolchevismo desde Rusia a Europa occidental.
En 1920, el nuevo Estado soviético, surgido tras una brutal guerra civil, era un caos. El mejor medio para asegurar su supervivencia era exportar la revolución a Alemania, también arruinada económicamente por la derrota en la I Guerra Mundial y destrozada por disensiones internas. Entre Rusia y Alemania estaba Polonia, recientemente independizada y decidida a seguirlo estando.
Adam Zamoyski nos cuenta cómo el ejército polaco, dirigido por el autodidacta general y antiguo terrorista Józef Pilsudski, logró en el último minuto –en lo que fue definido como el «milagro del Vístula»– una de las victorias más decisivas de la historia militar. En un escenario que recordaba el de las guerras napoleónicas, un denso torbellino de cosacos y lanceros a caballo pusieron en dificultades a los aviones y tanques bolcheviques.
Crítica de un usuario de Hislibris: > No es necesario que un buen libro de historia pase de las 500 páginas; a veces con apenas 160 se crea una auténtica maravilla. Me ha encantado este libro; en primer lugar, porque trata una guerra (la que aconteció entre la incipiente U.R.S.S. y Polonia al finalizar la I Guerra Mundial) de la que yo no recuerdo que se haya escrito más de dos líneas en la literatura en español; en segundo lugar, porque la explicación de los movimientos de tropas, las tácticas y la descripción de sus comandantes es, al mismo tiempo que completa, comprensible y facil de seguir. Tiene abundantes mapas de movimientos y batallas, varias fotografías en papel de buena calidad, y es tan intenso que en dos días me lo acabe. Quizás falle un poco en las conclusiones, porque a mi parecer, da demasiada importancia a las consecuencias directas e indirectas de esta guerra poco conocida fuera de Polonia, pero en definitiva un (muy) buen libro, y a un precio reducido (por fin por debajo de los 20 euros).
Un saludo.
http://www.hislibris.com/foro-new/viewtopic.php?p=79665
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La paz entre Polonia y Rusia se firmó finalmente en Riga el 18 de Marzo de 1921. Los negociadores polacos ansiosos por reparar la dañada imagen de su pais en el extrangero, no hicieron incapié en sus fronteras históricas y aceptaron un compromiso que, no obstante, incluía buena parte de Bielorusia y Ucrania. Tampoco intentaron dar acomodo en el acuerdo a una Ucrania independiente[...]
[...]Junto con los rusos blancos derrotados y otras minorías oprimidas, consideraban la paz, como muchos polacos escandalizados y los propios bolcheviques, una tregua en la lucha en marcha. Y eso resultó ser. En 1939, la Unión Soviética aprovecharía la opoertunidad ofrecida por Hitler de que se sirviera lo que quisiera de Polonia hasta una línea, que seguía más o menos la sugerida por lord Curzon en el verano de 1920. Dos años después, muchos Petluristas, rusos blancos, georgianos y otros se pusieron del lado de Alemania con la esperanza de expulsar a los bolcheviques o acceder a la independencia. Stalin coniguió en 1945 mucho de lo que él y Lenin habían intentado lograr en 1920, pero a partir de 1989 les llegaría el turno de triunfar a los herederos de Pilsudski y Petlura.
Vistos en este contexto, los acontecimientos de 1920 parece no solo irrelevantes, sino incluso pintorescos. El horrible Armagedón que asolaría el área dos décadas después, y la oscura noche del comunismo que se los tragó durante medio siglo, casi hacen que parezcan minúsculos. Las fronteras que hasta entonces se consideraban tan importantes cayeron en el olvido. Otro tanto ocurrió con las estructuras del Estado a las que tanto valor se les había atribuido. Y tambien con una asombrosa proporción de los actores principales. [...] Es como si hubieran sido objeto de una maldición. Y es dificil desterrar del todo la sospecha de que la conducta de Stalin hacia los polacos durante la década de 1940 estuviera teñida de venganza por la humillación de 1920.
De hecho, eso es lo que fue, y afectó profundamente al liderazgo bolchevique. Los acontecimientos habían revela do la fragilidad y los límites de su poder. También sugería que todo el mundo estaba en su contra, y qeu no podían confiar en el apoyo de las masas de otros países. Esto eneró una mentalidad de asedio, condujo al aislacionismo y a la doctrina del "comunismo en un solo país", expresada al mundo exterior con una agresividad hosca, defensiva. El orgullo herido se evidencia en la actitud de la mayoría de los líderes rusos hacia el resto del mundo, empezando por Lenin.
Sin duda, el aislamiento sufrido por Rusia durante las décadas de 1920 y 1930 ayudó a Stalin en su toma del poder y su implantación del terror. En última instancia, la arrojó en brazos de otro régimen nacido de la humillación y decidido a acabar con el acuerdo de Versalles: La alemania nazi. En 1939, cuando sus tropas marcharon sobre Polonia para apoyar a los alemanes, Stalin demostró que había aprendido la lección de 1919-1920. No intentaría atraer a los polacos hacia el comunismo; su anterior experiencia le había dejado claro que no estaban dispuestos. Así que se dedicó a eliminar no sólo a nobles, sacerdotes y terratenientes, sino tambén a médicos, enfermeras, veterinarios, y en general a todo aquel que mostrara el menor signo de pensamiento independiente o incluso curiosidad. Entre las docenas de cargos que implicaban la detención inmediata y la deportación, se incluía poseer una colección de sellos. Más de 1.500.000 personas quedaron atrapadas en esta fina red. Los oficiales asesinados en los bosques de Katyn y otros puntos. Los soldados rasos y los civiles fueron deportados a los Gulags, donde murió la mayoría. A partir de 1945, hizo todo lo posible por exteneder los mismos principios al resto de Polonia.
Resulta ocioso especular sobre lo diferentes que podrían haber sido las cosas en Rusia si se hubiera negociado algún tipo de paz a comienzos de 1919 y se hubiera evitado la guerra. Sería igualmente vano, aunque fascinante, intentar extrapolar las consecuencias de una victoria rusa en Varsovia en 1920: Polonia y los Estados del Báltico se habrían convertiro en repúblicas soviéticas, seguramente seguidas de Checoslovaquia, Hungría y Rumanía, y muy probablemente de Alemania, mientras que el resto de Europa se habría visto profundamente afectado. Nadie sabe si eso habría desembocado en la revolución mundial o en una cruzada internacional para destruir a la Rusia soviética, pero algunas de las consecuencias de esa guerra están ahi para quien quiera verlas.
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