Guadalcanal

Moisin-Nagant

23-10-2007

Esta batalla me ha estado llamando la atencion desde hace un par de dias, asi que decidi abrir este post para poner aqui toda la información referente a la misma.  <<12

La Última Miseria

Por Bill Wilder

La isla era una mas de tantas en el pacifico. Desde la distancia parecía un paraíso. Una vez en la isla, sin embargo, la idea cambiaba.

Las 90 millas que constituyen la isla están empapadas por lluvias, por ejemplo en Tulagi el promedio de lluvia anual es de 160 pulgadas! Las lluvias son peores de Noviembre a Marzo. Guadalcanal también es volcánica. Tiene una espina central de filosos picos cubiertos de selva tropical que en algunos lugares se elevan hasta 8.000 pies sobre el nivel del mar. Al suroeste las montañas bajan filosamente hacia la costa, mientras que en el noreste bajan suavemente llegando a crear enormes llanuras, con numerosos ríos y arroyos, estas llanuras habían sido despejadas para la plantación de Cocos. El resto del área estaba cubierta de árboles, arbustos y espacios abiertos plagados de abundante pasto Kunai, que llegaba a alcanzar la altura de 7 pies. Llamarlo pasto es menospreciarlo, sus hojas son duras y filosas como una navaja, definitivamente Guadalcanal no era el paraíso presentado por Hollywood.

Al desembarcar en la isla lo primero que se percibía era el olor, Guadalcanal apesta! Vegetación superabundante que se pudría rápidamente en el caluroso aire salado se convertía en un vaho atrapado entre la tierra y los densos árboles que casi nunca permitían ver el sol. El olor era el de constante descomposición y se adhería a todo lo que hubiese en la isla. Esto también daba la oportunidad para el cultivo de todo tipo de insecto imaginable, incluyendo al mosquito de la Malaria y millones de bacterias. Rica en cocos y lodo, la isla estaba mojada todo el año. Este continuo pantano cultivaba todo tipo de criaturas para hacer la vida de una persona miserable. Como si esto fuera poco también estaba el increíble calor. Bajo estas condiciones la vida era casi insoportable. Para los hombres ataviados con su equipo era casi imposible el simple hecho de estar en ese aire tan pesado. La selva tropical era como una malévola criatura, arrogante y cruel. Su apestoso aliento era solo una muestra de lo que había en su interior, esto incluía serpientes, cocodrilos y ciempiés.

Los cangrejos de tierra recorrían la isla por las noches sonando sorprendentemente como un japonés acercándose en sigilo. También había escorpiones, lagartos, sanguijuelas, las abejas eran otro compañero constante así como arañas del tamaño de un puño. Pero lo peor de todo eran los mosquitos. Eran como constantes nubes molestas y portadoras de enfermedades, principalmente la temida Malaria. No solo los problemas físicos hacían la vida diaria una miseria, el sentirse abandonado por su propio país era mentalmente destructivo. Después de menos de dos días el Almirante Fletcher comandante de la Task Force encargada de proteger a los Marines se retiro de la batalla. Sintió que los cargueros corrían peligro de ser atacados por mar y aire. Después del primer desastroso encuentro cerca de la isla Savo en donde cuatro de los seis cruceros que debían proteger a los Marines fueron hundidos, el resto de las naves junto con los transportes también tuvo que retirarse. Para el tercer día los Marines contemplaban un océano vacío de naves aliadas. La marina se había ido! Los Marines estaban por su cuenta, y así parecería por muchos días.

Muchas de las provisiones destinadas a los Marines habían sido enviadas a Panamá para su destrucción. Por algún milagro fue reempacada y enviada nuevamente a la 1era división de Marines, los obreros del puerto estaban en huelga así que los Marines tuvieron que hacer su propio embarque y desembarque mientras peleaban y pasaban hambre en el “Canal”.  60 barcos aliados llegaron a Noumea. Traían los preciados suministros para las hambrientas tropas atrapadas en combate, pero las tripulaciones de estos barcos se negaron a navegar hacia Guadalcanal si no se les pagaba exorbitantes cifras por horas extras y servicio en zonas de combate. Sus demandas fueron rechazadas, los barcos no zarparon y los marines no comieron.

Durante los meses más duros de combate algunos cargos de la marina definieron Guadalcanal como un fracaso. El General Hap Arnold de la fuerza aérea no permitía que los aviones llevaran suministros ya que pensaba que era desperdiciarlos. Sin embargo algunos líderes todavía confiaban en los desamparados Marines. El General Patch comandante de las fuerzas de Caledonia envió 10.000 pares de calzado a la isla al enterarse que algunos Marines estaban combatiendo descalzos.

Cuando los Marines se quejaron de la falta de comida el Coronel Edson de los Raiders señalo a las líneas Japonesas, “Ellos tienen comida, vayan a quitársela”, y eso hicieron, capturaron toneladas de arroz y comida enlatada, necesarios suministros para sobrevivir.  El Marine promedio perdió 25 libras en su estadía de cuatro meses en la isla. Muchos sufrieron de ceguera nocturna por la falta de vitamina A en su dieta. Su ropa se pudría adherida al cuerpo y no había nada con que reemplazarla, las municiones eran pocas y había que distribuirlas con mucho cuidado.

Otro material era necesitado desesperadamente e inexistente. Todo el equipo pesado de construcción se había ido con los transportes en su retirada. Lo único que había era lo que los japoneses habían dejado en su retirada. Los americanos lo utilizaron para terminar la pista y repararla luego de los ataques aéreos. Había un pequeño buldózer tan preciado que solo su operador podía tocarlo. Cualquiera que se acercase a el después de la orden de alto podía ser abatido.

Con pocas herramientas, escasa comida y una sensación de abandono, la situación era sombría, a esto hay que agregarle un enemigo fanático cuyo único objetivo era matar a su enemigo, haciendo cargas suicidas durante la noche, a veces gritando, a veces susurrando y tendremos una idea de lo que tubo que soportar la 1era División de Marines durante cuatro meses en Guadalcanal. Muchos Marines lo calificarían como lo más cercano al infierno que vivieron. En la entrada del cementerio de Marines en guadalcanal después de la batalla había un plato de metal clavado a una tabla, con una bayoneta se había escrito en el:

Cuando llegue al cielo

A San Pedro le dirá:

“Otro Marine reportándose señor

Ya he servido mi tiempo en el infierno”

A pesar de todas las adversidades los Marines habían llegado para quedarse. Historiadores que han estudiado la campaña la consideran más que una lucha por una isla. Morrison escribió “Guadalcanal no es un nombre, es una emoción., que recuerda desesperado combate aéreo, furiosa lucha naval nocturna, fanático trabajo de suministro y construcción, salvaje lucha en la espesa selva, la noches rotas por el aullido de las bombas y las ensordecedoras explosiones navales.

Hay quienes comparan la defensa de los Marines con aquellas de Waterloo, Little Round Top o Dien Bien Phu. Todas fueron situaciones donde ambas situaciones decidieron dar un ejemplo, y el prestigio transciende todo. Ganar era una cuestión de orgullo tanto para los japoneses como para los Marines. Era una cuestión no de suministros o terreno sino de voluntad. ¿Quién prevalecería? ¿Quién ganaría? Ambos bandos sufrieron terriblemente, pero serian los Marines los que alzaran la corona de la victoria.

Tengo una serie de escritos de este personaje sobre la batalla que espero ir traduciendo y compartir con ustedes. Espero que sea de su agrado su forma de escribgir y mi forma de traducir  <<12

Moisin-Nagant

23-10-2007

El comienzo de la ofensiva

Por Bill Wilder

Temprano en la mañana el 7 de Agosto de 1942 las 89 barcazas de la fuerza Naval estaban en posición y se dio la orden, “Desembarquen a la fuerza de desembarco”. Los Marines atacaron “Red Beach” (Playa Roja) sin oposición, no había nada después del inmenso bombardeo naval.

Red Beach era una pista de 1600 yardas de arena amarilla entre Lunga Point y Koli Point. Vandegrift supuso que los esperarían unos 5.000 japoneses, estaba muy equivocado solo había 1.000 Japoneses con algunos Coreanos que no estaban muy inclinados a la lucha ya que simplemente eran obreros.

Precisamente a las 9:10 el 5to Regimiento de Marines toco tierra y aseguro la playa, luego se hizo a un lado para que el 1er Regimiento se abriera paso tierra adentro. El progreso se hizo lento, los Marines después de semanas de estar apretados en los transportes y balanceándose a todos lados con su equipo además del miedo a lo desconocido avanzaban muy lentamente. Vandergift se frustro bastante con este hecho comentando que las tropas avanzaban en cuclillas “como si fuesen a encontrar a todo el ejército imperial”. Muy pronto las unidades se confundieron y mezclaron, haciendo más engorroso el avance. Un Marine en el flanco del avance simplemente desapareció, nunca lo encontraron.

Mientras tanto se hacia una increíble labor de desembarco en Red Beach, con pocos hombres para la tarea la playa se vio pronto desbordada de cajas, barriles y otros pertrechos, una pesadilla logística. El Capitán L.F. Reifsnider, comandante de la división de transportes envió a 15 hombres de cada barco para que ayudaran en la tarea. Los marineros se empaparon de sudor y frustración mientras veían a los Marines descansar en la sombra mientras bebían leche de coco. Pero todo llego a su fin cuando aparecieron aviones japoneses en el horizonte, alertados por el guardacostas Clemens la flota estaba en alerta.

Los bombarderos medio Betty llegaron primero, pero las cortinas de humo hicieron su bombardeo inefectivo, los Wildcats se lanzaron sobre ellos y los hicieron correr. Una cosa sin embargo estaba segura, los japoneses sabían donde estaban y pensaban hacer algo al respecto.

La primera noche en guadalcanal fue una experiencia que los Marines nunca olvidarían, a mas de 6.000 millas de casa en un pantano en una jungla calurosa llena de insectos y el temor de que te cortaran la garganta mientras dormías le quito el sueño a mas de uno.

Moisin-Nagant

24-10-2007

Guadalcanal a través de los ojos de alguien que estuvo ahí

Robert Leckie, notable historiador era un joven Marine artillero de ametralladora de la 1era División de Marines. Lucho en Guadalcanal. Así lo describió en su libro “Entregado desde el Mal”

“Era hermosa desde el mar, esta alargada isla. Sus montañas la recorrían de una forma majestuosa. El sol parecía besar sus arboles e iluminar gentilmente el césped. Gentiles olas lavaban sus blancas playas

Era hermosa, pero debajo de esa hermosura, detrás del collar de palmeras y arena, debajo de las copas de los árboles besadas por el sol, era una masa de pestilencia; llena de pantanos infectados de porquería habitados por enormes cocodrilos; arañas grandes como un puño y avispas largas como un dedo, hormigas que mordían como el fuego, sanguijuelas que caían de los árboles y se adherían a la piel, escorpiones sin las agallas para matarse ellos mismos o escorpiones cuyo paso por la piel dejaba un rastro de piel inflamada, serpientes que se deslizaban y cangrejos que se escabullan, ratas, murciélagos, aves de carroña y millares de insectos.

De día las nubes de moscas se alimentaban de las heridas abiertas infectándolas. De noche los mosquitos aparecían en nubes trayendo malaria, dengue y una docena de fiebres tropicales exóticas. De día o de noche llegaban las lluvias; y cuando es el monzón viene en torrentes, creando una vida llena de hongos y humedad en cada árbol o arbusto que goteaban continuamente pudriendo tanto los gigantescos árboles que el simple hecho de recostarse en ellos podía derribarlos.

Y Guadalcanal apestaba. Estaba infectada con el olor de su propia decadencia, su clima caliente y húmedo siempre tan cargado hizo que los miles de americanos que llegaron a ella durante los tres años de guerra que siguieron la maldijesen."

Moisin-Nagant

24-10-2007

El premio: Henderson Field

(Mas arriba pueden ver la ubicación en la isla de Henderson Field)

Henderson Field fue el centro de la lucha en Guadalcanal. El bando que tuviera el aeropuerto bajo su control controlaba Guadalcanal y las aguas al rededor.

Su posesión significaba ganar las islas Solomon, y los dos bandos estaban concientes de eso.

En estas fotos pueden apreciar el aeropuerto, marcado en negro esta la Pagoda usada como torre de control y centro de mando del comandante de los Marines.

Aquí se aprecia la Pagoda, que luego fue derribada ya que Vandergift llego a la conclusión de que los japoneses la usaban como punto de referencia para atacar el aeropuerto.

Moisin-Nagant

24-10-2007

La Fortuna de la guerra

Por Bill Wilder

Antes de que los Marines recibieran ordenes de ir a Guadalcanal, los japoneses habían desembarcado 1.000 soldados en Lunga Point en Julio de 1942

Su propósito era claro, a unas cuantas millas del final de la isla comenzaron a limpiar el terreno para construir un aeropuerto.

 

Se decidió que una fuerza más grande fuera enviada a la isla para aumentar las defensas. Aunque ninguno de los dos bandos lo sabia, la fecha para el desembarco de los Marines y de las fuerzas Japonesas era el 7 de Agosto.

Las fuerzas del coronel Ichiki se demoraron en llegar a la isla, de otro modo los Marines hubieran encontrado mucha mas resistencia de la que en verdad encontraron en Red Beach.

Parece que si existe la fortuna de la Guerra…

Moisin-Nagant

25-10-2007

Los Guardacostas – Ojos amigos en un campamento enemigo.

Por Neil Stalker

[size=8pt]Martin Clemens con algunos de sus Guardacostas[/size]

Una de las cosas más importantes de los satélites y radares era algún tipo de sistema de advertencia. En las islas del Sur Oeste del pacifico, bandas de voluntarios cumplían ese rol, los Guardacostas

Historia del servicio

Un servicio de guardacostas había estado operativo desde 1919 y era usado para vigilar las áreas de las que Australia era responsable.

La Royal Navy utilizaba mayormente, agricultores, oficiales del gobierno, comerciantes y misioneros como parte de sus operativos. El director de inteligencia naval, Comandante R.D.M. Long refino el sistema en 1930 y cuando estallo la Guerra, lleno los cupos. El comandante Eric Feldt, guardian de los campos de oro en Wau, Nueva Guinea fue llamado a servicio nuevamente. Se llevaba bien con los isleños y conocía muy bien las islas.

En Marzo los japoneses comenzaron su ocupación de las Salomón. Cuando los colonos se enteraron comenzaron a abandonar las islas en el Vapor Morinda, pero un viajero desembarco en Tulagi. Su nombre era Martin Clemens, era un joven aventurero que quería tomar posición como Guardacostas en Guadalcanal. Conocía bien la isla y a sus habitantes. Feldt lo enlisto como Guardacostas.

Los Guardacostas comenzaron a crear refugios camuflados y escondites de repuesto en toda el área, con especial énfasis en Rabaul, las islas Shortland y un pasaje de agua conocido como “The Slot” que estaba bordeado por islas con densa jungla y montañas, Santa Isabel y las New Georgia. Al final estaban las islas Rusell que estaban cerca de Guadalcanal y Florida. (Tulagi). La policía de las Salomón ayudaba activamente a los Guardacostas así como otros isleños fieles.

El 29 de abril los japoneses llegaron con bombardeo inicial de Tulagi. Los Guardacostas tomaron nota de aviones, barcos, y otras piezas de inteligencia que pudieran resulta útiles. Los comandos australianos en Tulagi radiaron un mensaje diciendo que estaban bajo ataque y abandonarían la isla. Clemens usando tres veleros evacuo a los residentes de Guadalcanal que pensaba podían estar en peligro cuando llegaran los japoneses.

Los japoneses desembarcaron en Lunga Point y construyeron un puerto con fuerza laboral a base de nativos. Los japoneses necesitaban a los nativos para trabajar así que los trataron bien al principio. Los Guardacostas infiltraron algunos de sus nativos en esta fuerza laboral pero los japoneses consiguieron poner a algunos de ellos en contra de los guardacostas. Esto constituyo a una situación de nervios al límite, donde no se sabía quien podía ser un traidor.

Aunque los japoneses los estaban buscando, Clemens llevo a cabo arriesgadas misiones de reconocimiento a los campamentos japoneses para señalar con exactitud blancos como radios u otros equipos. Eventualmente Clemenes fue forzado a moverse tierra adentro hacia las montañas, en la villa de Vungana.

Clemens seguía en Guadalcanal para cuando llegaron los Marines, se contacto con ellos a trabes del Sargento Jacob Vouza un ex Sargento Mayor británico que trabajaba con el.

El 14 de Agosto se contacto a Clemens y el y sus 60 hombres atravesaron las líneas japonesas hasta llegar a los americanos, donde fueron alimentados y expusieron sus conocimientos de inteligencia. Clemens ofreció sus fuerzas para que ayudaran como mensajeros y Scout.

El 20 de agosto, el Sargento Vouza organizo una misión de reconocimiento a “Alligator Creek” y fue capturado, llevaba una bandera americana con el, fue atado y apuñalado, luego abandonado para que se desangrara. Vouza mastico sus ataduras hasta soltarse y luego se arrastro hasta las líneas americanas, aunque tenia varias heridas se recupero. Clemens continuó con sus operaciones de Scout y también de rescate de por ejemplo aviadores derribados.

Moisin-Nagant

25-10-2007

Tulagui, Tanambogo y Gavutu; 7 de Agosto

Por Bill Wilder

Mientras los diecinueve transportes cargando a la 1era División de Marines y su equipo se acercaba a Guadalcanal los hombres abordo estaban mas que listos para luchar. Después de haber tenido que cargar todo su equipo por una huelga en los muelles y pasar días encerrados y apretados en un barco, estaban más que listos para matar algo!

Tulagi era una pequeña isla  cerca de la isla Florida, debía ser atacada por el 1er batallón de Raiders de los Marines, comandado por el Coronel "Red Mike" Edson. Con una maliciosa sonrisa y fríos ojos, Edson era un Marine de cartelera, muy respetado por sus hombres.

Los Raiders fueron creados por Merritt Edson y Evans Carlson en enero de 1942, la unidad pretendía ser algo así como los comandos ingleses, aunque los dos batallones demostraron ser excelentes combatientes y se cubrieron de gloria la unidad fue deshecha exactamente dos años después de su creación ya que no había mucha gente en las altas esferas de acuerdo con las ideas de Edson y Carlson.

Los Raiders de Edson saltaron de sus botes y entraron en acción rápidamente. Dos compañías atacaron adelante, cerca de 2/3 a trabes de la isla. Otras dos compañías las siguieron, se movieron al norte y tomaron el control para luego unirse a los otros.

Mientras los Raiders atacaban con tres compañías, los japoneses abrieron fuego sorpresivamente desde posiciones escondidas en la densa jungla y varias cuevas. Los gruesos troncos proveían una cobertura natural para ametralladoras y francotiradores.

En la pequeña isla de Tanambogo, otra fiera batalla se llevo a cabo entre ParaMarines y los defensores japoneses. La isla pronto se convirtió en un campo de batalla medieval.

A Gavutu las tropas llegaron sin mayores problemas. Los defensores parecían haberse acobardado con las descargas navales que precedieron a los desembarcos. Cuando la segunda y tercera oleada se acercaban a la isla, los defensores comenzaron a responder con piezas pequeñas de armamento pesado y armas anti-barcos. Los disparos venían desde la Colina 148 y Tanamabogo. El mayor Williams fue herido cuando se bajaba de su bote de desembarco así que el mando de la operación se paso al Mayor Charles A. Millar, su ayudante.

Los hombres comenzaron a morir en la pequeña franja de playa, y la única solución era moverse tierra adentro aunque estuvieran bajo fuego. Lentamente los Marines comenzaron su avance. La matanza continuo y finalmente a mediados de la tarde la Compañía A logro tomar el control de la Colina 148. Sentarse en esa colina era como sentarse en la cima de un volcán. En su interior había unas dos docenas de cuevas y trincheras escavadas por los japoneses. Estas cuevas serian detonadas con explosivos, muchas por el capitán de ingenieros Harry Torgeson quien en su primer intento se voló los pantalones. Cuando sus hombres le señalaron su trasero desnudo, contestó “No se preocupen, vamos a buscar la siguiente”

Gavutu parecía asegurada, pero en Tanambogo la lucha continuaba. 

El General Rupertus asistente del comandante de división, radio pidiendo un ataque aéreo en el islote y también le pidió al capitán Crane de la compañía Dog que se subiera a los botes y atacara al anochecer. Rupertus se negó a escuchar las protestas de un rango inferior acerca de que seria mas seguro atacar al día siguiente así que los hombres de Crane se subieron a los votes y se encaminaron hacia Tanambogo, donde se encontraron con un asesino pulular de balas que hizo que solo un bote llegara a la playa, sus ocupantes fueron masacrados en la misma. Los otros dos agujereados en mil lugares se retiraron a Gavutu, los sobrevivientes del primer bote se retiraron por la conexión que había entre las dos islas, esquivando balas mientras corrían o se arrastraban.

Los Marines que quedaban en Tanambogo intentaban escapar. No había ningún bote disponible y estaba muy oscuro para apoyo naval o aéreo. Tendrían que nadar o llegar hasta la conexión entre las dos islas, cualquiera de las dos sin apoyo. Mientras algunos Marines defendían la posición el resto se escapo a trabes de la conexión y luego los Marines que defendían se retiraron llevándose con ellos a los heridos y muertos que pudieron.

Mientras caía la noche los Raiders en Tulagi sintieron una poco tranquilizadora calma. El Coronel Edson y sus hombres prepararon posiciones defensivas, nadie sabia que podían esperar.

Luego del sangriento encuentro en Gavutu los Marines pasaron una poco tranquila noche temiendo que seria lo que sucedería en el próximo asalto a la hermana isla de Tanambogo.

A primera hora se enviaron refuerzos a la batalla. El 3er Batallón llego a Gavutu así como la Compañía C del 2do Batallón de Tanques y la Compañía A del 2do Batallón de tractores anfibios y Pack howitzers del 3er Batallón fueron llevados a la costa. En una de las colinas de Tanambogo flameaba desafiante una bandera japonesa y molesto por este hecho un Marine consiguió una bandera de USA y la clavo en la sima de la Colina 148. Mas entrada la mañana los marines entraron en acción, atacaron desde Gavutu con ametralladoras y el Destructor Monsson se acerco a la costa para atacar las playas. En la tarde el Capitán de la Compañía I comando a sus hombres hacia las playas manchadas de aceite y sangre, el Teniente Robert Sweeney iba con el, posicionando sus dos tanques Stuart en la playa. Al mismo tiempo la Compañía K comenzó a cruzar la conexión entre las dos islas.

Los japoneses defendieron con ferocidad en los dos frentes. Sus ametralladoras limpiaban la conexión hacia derecha e izquierda, a pesar de todo la Compañía K logro cruzar. Cuando llegaron a la isla los japoneses salieron de sus escondites, y repentinamente la lucha era con bayoneta, culatas de rifle, puño contra dientes, hombre contra hombre y acero contra acero.

La compañía I también tubo combate cercano, pero estaban apoyados por los Stuart. Pero para sorpresa de los americanos, los japoneses no estaban asustados, al contrario, se abalanzaron contra los dos tanques con varas y otros artefactos para inmovilizarlos, mientras cargaban contra los tanques, los Marines cargaron contra ellos y las ametralladoras y cañones de 37mm los hicieron pedazos. A pesar de todo los japoneses seguían lanzándose sobre ellos, y parecía que los Marines y los tanques no iban a ser suficiente para parar el ataque. El teniente Sweeney abrió la torreta para evaluar mejor la situación e inmediatamente recibió una descarga en la cabeza, cayendo en el interior del tanque precisamente cuando los japoneses lograron inmovilizar al tanque con una vara. Los Marines llegaron poco después pero la tripulación ya había sido atacada con machetes y garrotes, a pesar de esto lograron rescatar a dos de los tripulantes, aunque estaban heridos de bala, quemados y cortados, uno de ellos era Sweeney. El segundo tanque retrocedió para poner distancia entre el y los japoneses pero quedo atascado con un cocotero que había sido derribado. Un oficial japonés lo roció con gasolina y le prendió fuego, la tripulación tuvo el mismo destino que la tripulación de Sweeney.

El comandante de los Marines molesto con el curso de la batalla, ordeno la primer carga con bayoneta americana de la guerra, sus hombres corrieron hacia las posiciones japonesas blandiendo sus armas, disparando y cortando.

La carga fue tan intensa que logro que los japoneses se retiran. Durante la noche patrullas de Marines aseguraron el pequeño islote y destrozaron foco de resistencia tras foco de resistencia. Para la mañana del 9 la tarea estaba completa. Las dos pequeñas islas estaba completamente bajo control de los Marines.

Fotografias

Tulagui

Tanambogo y Gavutu

Tanambogo al frente y Gavutu detras

Tanambogo

Moisin-Nagant

25-10-2007

La patrulla Goettge

Por Bill Wilder

[size=8pt]Frank Goettge[/size]

En los primeros días de la ocupación por parte de los Marines de la zona norte de Guadalcanal un oficial Naval fue capturado, el Coronel Frank Goettge, oficial de inteligencia de la división asistió a su interrogatorio. El prisionero dijo que sus compañeros estaban pasando hambre y se sentían abandonados, así que estaban dispuestos a rendirse. Esto, sumado al hecho de que se había visto una bandera blanca en la zona hizo que Goettge pensara que un viaje al área podía ser productivo, se lo propuso a Vandegrift quien le dio permiso para llevar a cabo la misión.

La patrulla Goettge salio la mañana del 12 de Agosto, viajaron en botes Higgins y desembarcaron en la boca del Matanikau. Estaba compuesta por alrededor de 25 hombres, incluidos algunos personajes claves de la sección de inteligencia del 5to regimiento. El resto estaba como protección si las cosas salían mal, como pronto salieron. Una vez en la playa Goettge marchó tierra adentro con el prisionero atado con una cuerda al cuello. Tan pronto como salieron de la playa una ametralladora abrió fuego matando a Goettge y al prisionero. La supuesta bandera blanca era en realidad la bandera de guerra japonesa con el círculo rojo en el centro. Los japoneses definitivamente no estaban dispuestos a rendirse. Los Marines crearon un reducido perímetro de defensa en la playa y mandaron un mensajero que fue nadando hasta “Red Beach” llego totalmente agotado y con graves heridas a causa del coral. Uno por uno los miembros de la patrulla murieron o fueron heridos, dos marines viendo lo insalvable de la situación, se desnudaron y se lanzaron al río, los japoneses seguían disparando mientras ellos se alejaban a nado. Finalmente llegaron a las líneas amigas, desde el agua podían ver algo que brillaba en la playa de donde habían salido, eran espadas en las manos de los japoneses que terminaban el trabajo que las balas habían comenzado. Este fue el hecho que desato la masacre de Guadalcanal, después de que los Marines se enteraron del final que tuvieron los miembros de la patrulla ninguno de los dos bandos estuvo dispuesto a dar cuartel. “Espadas brillando al sol” quedaría grabado en la mente de los Marines para los próximos enfrentamientos en la isla, pocos prisioneros serian tomados después de ese incidente.

Moisin-Nagant

25-10-2007

La patrulla Brush

Por Bill Wilder

El 12 de Agosto un cura católico de Tetare informo de posible actividad japonesa en el área.

Una patrulla fue enviada el 19 para recolectar más información de que estaba sucediendo al este.

El Capitán Charles H. Brush junto con unos sesenta Marines de la Compañía A, 1er Batallón, 1era División se encargo de buscar al enemigo y destruir una posible estación de radio en Gurabasu. Al mismo tiempo las tropas del Coronel Ichiki, vanguardia de un ataque japonés en Guadalcanal formaban una patrulla de 38 hombres para establecer un centro de comunicaciones en “Alligator Creek”. La patrulla era comandada por el Capitán Shibuya.

Cuando Brush y sus hombres hicieron un alto alrededor del mediodía del 19, los nativos les advirtieron de una gran fuerza de japoneses que se acercaba a ellos. El capitán reacciono con velocidad y justo a tiempo. En pocos minutos la acción comenzó. Un pequeño contingente al mando del teniente segundo Joseph Jachym rodeo al enemigo y ataco por su flanco izquierdo. La sorpresa fue amarga para los japoneses y casi toda la patrulla fue eliminada, solo 3 Marines murieron y otros 3 fueron heridos. Al examinar los cuerpos de los enemigos muertos, los Marines encontraron que llevaban uniformes nuevos e insignias diferentes, eran unidades diferentes a las que se habían enfrentado anteriormente. También encontraron varios papeles de inteligencia, entre ellos un mapa donde se detallaban las posiciones defensivas de los Marines en el río Ilu y lo malo de las defensas en ese lugar. Brush se apresuro a volver al cuartel general a reportar lo sucedido y lo encontrado. Era evidente que el enemigo estaba preparando un ataque y era fuerte, y era contra su flanco izquierdo! Los Marines sin embargo, ahora podían prepararse.

Armia Krajowa

25-10-2007

Cuales son las razones de realizar la pelea tan al ecuador? las salomon eran estrategicamente importantes por situarse entre Australia y Filipinas?

Kurt Meyer

25-10-2007

Buen trabajo Moisin. <<37

Una lastima que no tenemos ninguna descripción de estas batallas desde el punto de vista japones - al menos nada tán "poetico". Pero és cierto que los mismos estaban mucho menos preparados para sobrevivir bajo estas codicciones que los americanos. Me imagino su sufrimiento.

Sigue Moisin.

Saludos <<34

Moisin-Nagant

25-10-2007

La verdad es que no lo se Kurt, pero supongo que los Japoneses ya tenian sus campamentos bien preparados para cuando llegaron los Marines, aunque dejaron mucha comida en su retirada eso si...

En Gavutu y las demas islas pequeñas se pueden ver los edificios construidos por la antigua administración Inglesa. Yo tengo varias fotos de almacenes, casi todos capturados por los Marines. Y tienes razon, creo que todo lo que tengo esta escrito desde el lado de los Marines.  <<10

Muchas gracias a los que me felicitaron, me alegro que les guste.  <<34

Kurt Meyer

25-10-2007

Gracias a ti por tu trabajo Moisin. <<37

Lo que quiero decir Moisin, és que tienes que imagianr que los japoneses empezaron de lo nada. Si que tuvieron sus campamentos, pero me imagino lo sufrimiento de construirlos. És bién conocido el hecho que los japoneses (y sus obreros) tenian que hacer todo con sus propias manos. No tenian los famosos Bulldozers americanos. Te imaginas la construcion de un aeropuerto así, o las cuevas y trincheras en suelo vulcanico?

Saludos <<34 

Moisin-Nagant

25-10-2007

Mmmm, creo que te equivocas Kurt.

Si lees bien veras que los Japoneses si tenian Tractores y algo mas de maquinaria, no era la mejor pero fue la misma con que contaron los Marines ya que los transportes se retiraron con su armamento pesado, comida y maquinaria pesada de trabajo.

Ademas de que los japoneses tenian mano de obra de isleños y Coreanos.

Armia Krajowa

25-10-2007

Porque daban por perdida la isla , y porque no se llevaron a los marines ... no daba tiempo? he estado leyendo pero no me ha que dado claro.

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